Mientras haya frasco, siempre habrá tío borracho. ¿Bonita frase, no? La verdad la acabo de inventar mientras buscaba una manera certera de describir a Willie DeVille, experto en las artes etílicas y arquitecto visual y sonoro de parte sustancial del rap hecho en Latinoamérica en tiempos recientes. Y es que de alguna forma parece que el trago y el maldito tiempo no tienen final para él. Lanza un tema, y al día siguiente presenta un proyecto nuevo, y la semana que viene está produciendo un video. Así es nuestro tío borracho.
Esta ocasión, DeVille-San decidió subir lo que parece será una serie de capítulos distintos que formarán parte de un compilado de hazañas de expertos alcohólicos titulada “Bitácora de un Borracho”. El episodio inicial es un video de casi tres minutos que forma parte de la exitosa saga de los venecos en Guanatos, donde el de Anzoategui graba en cámara un freestyle de Akapellah derramando grasa nocturnal entre botes de cerveza y una bacha camino a la extinción. Las habilidades líricas supremas del Goldo son tangibles aún bajo los efectos despiadados del alcohol,
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“Lo que mejor demuestra lo desastrosa que fue esa época, es que debí haber grabado cerca de 10 freestyles de Pellah (o más), pero este fue el único que sobrevivió. Amé vivir con este ícono; personaje emblemático, de avasallante carisma e innegable talento. Brutal vida que decidí vivir”, dice el tío Willie en la descripción del clip.
“Bitácora de un Borracho” se suma a la cartera de proyectos que el fundador del Dojo tiene previsto trabajar a lo largo del año, incluyendo el primer disco del colectivo que comanda, el mixtape de Los Serios del Caribe, el proyecto instrumental de La Nueva Onda Latina, además de su disco debut en solitario, y más y más videos que sumen a su extensa lista de créditos.
Por lo pronto, disfruta de la primera entrega del show del tío borracho al inicio de la nota y brinda con un ¡salú!
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