En los días posteriores al EDC 2015, parece que los cuerpos de las mujeres son el tema de interés. Han surgido muchos puntos de vista con respecto a los cubrepezones (pasties) y las mujeres que los usan en los festivales de música. A primera vista, el ensayo del usuario de Medium teri 6ie6er titulado “Una carta a mis hijas y la comunidad femenina del EDM” es la apasionada petición de una madre suplicando que las mujeres jóvenes se respeten a sí mismas. Sin embargo, luego de un párrafo, una narrativa muy distinta surge y 6ie6er revela que no apareció para discutir el feminismo, sexismo en el EDM o la cosificación de las mujeres jóvenes. Sino que, está más comprometida a compartir su desilusión con la forma en que la música dance ha evolucionado – como ella propone – van desde “freaks y geeks” hasta “bros y hos” y su aparente falta de interés por dejar ir sus propios días de gloria en los raves de los 90s.
El ensayo discute la experiencia de la autora al asistir al Electric Daisy Carnival con su “pandilla de ravers aferrados de la vieja escuela” y la consternación que vivió al observar que la moda rave había cambiado dramátic amente en los veinte años desde que ella comenzó a bailar con sus Jnco y camisetas de bebé. Mientras se enfocaba principalmente en atacar a las chicas en el festival, aunque se jactaba de no ser “ninguna mojigata”, parece aparente el hecho de que la escena haya cambiado en los últimos 20 años es lo que la tiene consternada.
Videos by VICE
Honestamente, ¿esperaba que se quedara igual?
Yo era una raver también en los 90s, en mi pueblo natal, Detroit. Sin importar cuanto atesore esas memorias nubladas por las drogas, no tengo ningún deseo ni intento recrearlas en 2015. No es posible, y aún más importante, yo también he cambiado.
Por ejemplo, el otro día estaba en el súper mercado comprando la comida; lo regular, cosas que como col y aguacates y demás, cuando vi unos bagels en el congelador. Me encantaban los bagels cuando era niña, me comía un paquete entero en una sentada, fácilmente. Pensé, “¡A la mierda!” y los eché en mi carrito. En medio de la emoción por esta delicia sentimental, corrí a casa, los descongelé y me ocupé de lo propio. 15 minutos después, estaba hinchada, un poco nauseabunda y con mucho malestar. Ni siquiera sabían bien, no como lo recordaba. Han cambiado las circunstancias de mi paladar; ya no soy una niña de 12 años que ve Full House, ¿me explico? La reacción de 6ie6er a las chicas del EDC tiene más que ver con su distinta, más experimentada, y anticuada perspectiva que con las jovencitas ravers en cuestión.
6ie6er recuerda su propia vestimenta de fiesta —crop tops y bras sueltos— en esa época, ese look seguramente proporcionaba mayor cobertura que los pasties y tangas que usan las chicas de ahora en los festivales. Aún así, suenan como si hubieran sido elegidas con la misma intención: verse lindas y sexys. La sexualidad ha sido parte de la cultura dance desde comenzó, ¿y cómo no podría serlo? En medio de multitudes de chicos sudados bailando con música llena de bajeos en clubes oscuros y bodegas donde las drogas y el alcohol fluyen como ríos. Aunque la seguridad de las mujeres en particular es un problema que necesita ser monitoreado y resuelto constantemente, la implicación explícita de 6ie6er de que usar ropa sexy demuestra una falta de respeto propio y manda un mensaje erróneo a las “decenas y decenas de miles de ligeramente intoxicados jovencitos que las acechan” no sólo es una hipocresía, sino profundamente ofensivo también. Llega tan lejos como decir que estos atuendos también son la causa de que las artistas mujeres lleguen a tocar en el festival.
El respeto propio no se trata de cubrir tu cuerpo para no tentar a los hombres. El respeto propio se trata acerca de tomar el control de tu sexualidad y expresarla como mejor te convenza. El respeto propio se trata acerca de sentirte bien con tu piel y usar lo que se te venga en gana, a pesar de lo que piense la gente.
¿Por qué las chicas eligen usar esos atuendos reveladores, si no es para ser unas mujerzuelas e imanes de violadores como 6ie6er piensa? La columnista de LA Weekly Jessie Shiewe abordó esa pregunta con su artículo “Usé pasties en EDC y no estuvo tan mal” y para darles la versión resumida: es algo bastante divertido y liberador. Espero les guste.
Respecto a 6ie6er, lamento mucho que su intento por indignarse como si estuviéramos en 1995 no funcionara tan bien. Tal vez sea el momento de entregar su título como reina del rave y dedicarse sólo a las fiestas con vinos y quesos. Yo llevo los bagels.
Malina Bickford se respeta a sí misma en Los Angeles y en Twitter.