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La vida del narcotraficante mexicano más famoso en los últimos tiempos, Joaquín ‘El Chapo’ Guzmán, tiene un nuevo capítulo: su encarcelamiento en una prisión de Estados Unidos. Después de burlar a las autoridades mexicanas durante años y de escapar dos veces de cárceles de máxima seguridad, el capo podría pasar sus últimos años encerrado en un país que no es el suyo… de la misma forma que muchos de sus colegas y enemigos del mundo criminal.
De acuerdo con datos de la Procuraduría General de la República (PGR), son 348 las personas entregadas por México al gobierno de Estados Unidos, por delitos contra la salud, entre el 1 de enero de 2007 y el 30 de abril del 2016. Según el documento de la PGR, hecho público mediante una solicitud de información, durante la administración del expresidente Felipe Calderón, se extraditaron 266, mientras que con Enrique Peña Nieto, quien asumió el cargo en diciembre de 2012, la cifra es de 82.
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En 2013, durante su primer año como presidente, Peña Nieto extraditó a 25 personas, en 2014 fueron 17, en 2015 la cifra subió a 28 y en los primeros cuatro meses de 2016 se registraron 12 extradiciones. A dos años de concluir su mandato, el presidente de México ha entregado a menos de la mitad de personas que su antecesor.
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Las extradiciones de supuestos criminales a Estados Unidos no son nuevas. Desde 1993, cuando Bill Clinton ocupaba la Casa Blanca y Carlos Salinas era presidente de México, y hasta enero del año pasado, han sido sido entregadas 1.064 personas a las autoridades estadounidenses. Además de delitos contra la salud, han sido requeridos otros casos como homicidio, violación de menores, tráfico de personas y lavado de dinero.
Entre los narcotraficantes mexicanos más famosos que han sido enviados a Estados Unidos se encuentra Osiel Cárdenas Guillén, líder del Cártel del Golfo y fundador de Los Zetas, que en sus inicios eran militares de élite que operaban como su guardia personal, pero después se convirtieron en uno de los cárteles más poderosos y sanguinarios de México. Osiel fue detenido en marzo del 2003 y enviado a Estados Unidos en 2007, junto con otro de los líderes más antiguos del narcotráfico: Héctor ‘El Güero’ Palma, quien regresó a una prisión de máxima seguridad de México en junio del año pasado.
Otro de los capos que apareció decenas de veces en los titulares de la prensa es Édgar Valdez Villarreal, mejor conocido como ‘La Barbie’. Durante años se le involucró con la organización de los hermanos Beltrán Leyva, antiguos socios de ‘El Chapo’; sin embargo, después de disputas internas los hermanos se volvieron enemigos de ‘El Chapo’ y ‘La Barbie’ cobró notoriedad mediática. Fue detenido en agosto de 2010 cerca de la Ciudad De México, por delitos contra la salud, homicidio y delincuencia organizada, entre otros, fue extraditado en octubre de 2015 a Estados Unidos, junto con otras 12 personas, entre ellas, Jorge Costilla Sánchez, ‘El Coss’, líder del Cártel del Golfo.
‘El destino de ‘El Chapo’ depende de la información entregue a EE. UU’.
El 18 de febrero de 2010, los medios mexicanos resaltaron la extradición de Vicente Zambada Niebla, ‘El Vicentillo’, hijo de Ismael ‘El Mayo’ Zambada, quien durante años ocupó, junto con ‘El Chapo’ Guzmán, la jerarquía más alta del Cártel de Sinaloa. Varios especialistas señalan que la captura de ‘El Chapo’, habría dejado como líder indiscutible del cártel a ‘El Mayo’; sobre la extradición de su hijo ‘El Vicentillo’, el entonces embajador estadounidense en México, Carlos Pascual, dijo que era “la extradición más notoria” desde la de Osiel Cárdenas.
Otros de los narcos que han sido enviados a Estados Unidos son: Sandra Ávila Beltrán, alias ‘La Reina del Pacífico’, relacionada con el Cártel de Sinaloa; Benjamín Arellano Félix, líder del cártel de los hermanos Arellano Félix, y Alfredo Beltrán ‘El Mochomo’ líder de la organización de los hermanos Beltrán Leyva. Sin embargo, la extradición de ‘El Chapo’ ha sido la más polémica en los últimos años.
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“‘El Chapo’ fue enviado a Estados Unidos por un compromiso que tenían las autoridades mexicanas con ese país. Ya que los trabajos de inteligencia estadounidense y las labores de sus agentes en México fueron indispensables para detenerlo”, asegura a VICE News, José Reveles, periodista y especialista en temas de narcotráfico.
Reveles asegura que muchos de los capos mexicanos en Estados Unidos ofrecen información de sus operaciones criminales o de sus enemigos para recibir beneficios carcelarios o mejores tratos en prisión, e incluso algunos dejan de ser formalmente presos para acogerse al programa de testigos protegidos y trabajar para las agencias antidrogas estadounidenses.
“El destino de ‘El Chapo’ depende mucho de lo que le diga a las autoridades, de qué información entregada les pueda servir para armar más casos contra otros capos. Podría revelar incluso las finanzas de sus socios criminales en los 50 países en los que operaba su organización, el Cártel de Sinaloa”, señala el especialista.
Finalmente, explica que habrá que esperar a ver cómo se desarrolla la situación jurídica del capo durante la administración de Donald Trump. “No sabemos si el gobierno de Trump lo requería, el envío fue una especie de recompensa por parte de México para el gobierno de Barack Obama.
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