Desafío catalán al sistema constitucional español en las próximas elecciones

España se enfrenta a un desafío rupturista sin precedentes en su corta historia democrática. Las próximas elecciones autonómicas del 27 de septiembre en la comunidad autónoma de Cataluña serán el campo de batalla de dos fuerzas electorales que abogan por la ruptura con el marco constitucional pactado en 1978.

A la situación actual se ha llegado después de una escalada de la tensión entre los gobiernos de Madrid y Barcelona que tuvo su punto de partida en 2006 con la aprobación de un nuevo Estatuto autonómico para Cataluña por parte del parlamento catalán y el compromiso verbal del gobierno socialista de José Luís Rodríguez Zapatero para implementarlo. 

Videos by VICE

Un Estatuto que nunca llegó a entrar en vigor porque el Tribunal Constitucional declaró inconstitucionales algunos de sus puntos tras una enmienda del Partido Popular (PP). Este hecho provocó la primera gran movilización en Cataluña el 10 de julio de 2010. La llegada del Partido Popular y Mariano Rajoy al Gobierno en noviembre de 2011 tensó aún más la cuerda entre ambas administraciones.

De pedir una mejor financiación para la región, la formación de centro derecha Convergència Democràtica de Catalunya (CDC) que gobierna la región autonómica ha pasado a abrazar las tesis independentistas como único camino para “tener un estado más justo”. La falta de diálogo entre Madrid y Barcelona ha provocado que desde 2012 miles de catalanes se hayan echado cada 11 de septiembre (día nacional de Cataluña) a las calles a favor de la independencia. Unas manifestaciones donde la sociedad civil ha jugado un papel muy importante más allá de las formaciones políticas.

El último gran episodio de esta pugna se vivió el pasado 9 de noviembre de 2014 cuando el gobierno catalán organizó una consulta sobre la independencia como alternativa al referéndum que la Justicia española consideró inconstitucional.

Elecciones del 27 de septiembre

Las elecciones autonómicas contarán con dos listas que apuestan por romper con el sistema constitucional español.

Por un lado, una lista transversal que pretende convertir la contienda en una plebiscito por el ‘Sí’ a la independencia de Cataluña. Esta singular apuesta ha sido posible gracias al acuerdo entre la formación de centro derecha de Convergència Democràtica de Catalunya (CDC), el partido del presidente catalán, y el líder de la oposición socialdemócrata Esquerra Republicana de Catalunya (ERC).

Los dos primeros grupos en número de escaños en el parlamento autonómico están llamados a liderar una lista integrada, también, por destacadas líderes de los movimientos sociales independentistas que han sostenido masivas movilizaciones en las calles y por Raül Romeva, ex eurodiputado proveniente de un partido, Iniciativa per Catalunya Verds-Esquerra Unida i Alternativa (ICV-EUiA), contrario a las políticas económicas de Mas.

La otra gran candidatura conjunta es la de ‘Catalunya sí que es pot’ (Catalunya sí se puede), una entente de partidos de izquierda, con Podemos al frente de un acuerdo electoral con la formación ecosocialista ICV-EUiA, a la espera de la adhesión, o no, de movimientos sociales circunscritos en este espacio político.

Es la respuesta catalana al proceso de cambio que vive España en su conjunto y su objetivo es aplicar un plan de choque social para hacer frente a la situación de crisis económica que ha comportado drásticos recortes y ha mermado el estado del bienestar.

El fenómeno Podemos: el nuevo partido de izquierdas que ha transformado el escenario político español en 2014. Leer más aquí. 

El presidente de CDC, Artur Mas, hizo ayer un llamamiento a los casi dos millones de catalanes que votaron a favor de la independencia en la consulta del 9N para que voten a la candidatura unitaria. “La gente que votó por el Sí-Sí tiene que votar nuestra lista” y ha amenazado con que si no gana la opción independentista en las urnas, Cataluña “caerá en una vía muerta”. “En Madrid nos pasarán por encima sin misericordia”, añadió.

Por su parte, el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, dijo la semana pasada que el “Estado está preparado para actuar” y que “no habrá independencia de Catalunya”.

El presidente añadió que el 27 de septiembre habrá elecciones “autonómicas” sin más y pidió a Mas que no genere frustración como Tsipras. Rajoy pidió “responsabilidad, sensatez y prudencia” y aseguró que no permitirá que “se obligue a los catalanes a elegir entre ser catalán, español y europeo”.

Miles de vascos defienden el derecho de autodeterminación a pocos meses de las elecciones. Leer más aquí.

“Queremos convertir el 27 de septiembre en un referéndum, un referéndum que no nos dejan hacer. Esta lista es una lista del ‘Sí’, del sí a la independencia. No es la lista de nadie y, a la vez, es la lista de todos”, comenta a VICE News Oriol Junqueras, presidente de ERC y jefe de la oposición en el parlamento catalán.

Junqueras se refiere a la oposición del Gobierno español a un referéndum en la que los catalanes diriman si quieren pertenecer a España o erigir un estado independiente.

Acciones del Estado

La carta magna española prevé la suspensión de la autonomía en su artículo 155. Pero el proyecto de Ley de seguridad nacional del gobierno de España, cuya aprobación está prevista para este miércoles, daría al Estado atribuciones para declarar una excepcional “situación de interés para la seguridad nacional” en interés de “la defensa de España y sus principios y valores constitucionales”.

Esta situación permitiría disponer al ejecutivo de todos los medios “materiales y humanos” con los que enfrentar esas amenazas sin recurrir a la suspensión del autogobierno catalán. Aunque el ministro de Justicia español, Rafael Catalá, ha descartado hoy en la inauguración de los cursos de verano de la Universidad Complutense de Madrid que esta ley vaya a ser utilizada para frenar al proceso objeto de controversia.

Ante este supuesto, Junqueras declara que “la única vía que tenemos es la democracia. Hacer valer la voluntad de la mayoría” y que “aquello determinante es lo que quieren la mayoría de ciudadanos de nuestro país. Es la fuerza de la razón contra la razón de la fuerza que utiliza el gobierno español contra Cataluña”.

Pero no todo el independentismo se encontrará bajo esta lista. A la izquierda de ERC, la iniciativa Crida Constituent – Per la Ruptura, capitaneada por la Candidatura d’Unitat Popular (CUP), puede disputar al partido de Junqueras al electorado más implicado en lo social.

“Intentaremos que no sea así. Por eso insistimos en que ésta será la papeleta (electoral) del ‘Sí’. La persona que lidera la lista, Raül Romeva, es, claramente, una persona con un profundo sentido de la justicia social, que tiene claro que queremos la independencia para hacer un país libre y justo”, constata Oriol Junqueras.

El ’15M’ asalta las instituciones en España, pero el régimen aguanta el golpe. Leer más aquí. 

Romeva, quien ocupó un escaño en el parlamento Europeo por ICV-EUiA, uno de los grupos que integran la coalición de izquierdas, es un ejemplo de los múltiples vasos comunicantes entre estas dos grandes fuerzas políticas que aspiran a gobernar el parlamento autonómico catalán y la CUP.

En declaraciones a Catalunya Ràdio, el ex eurodiputado declaró que, para él, ni la lista de izquierdas ni la CUP “son los adversarios” de su apuesta política.

Ambas opciones representan una voluntad de cambio desde posiciones diferentes, en lo social y en lo nacional. Carme Forcadell, quien fuera cara visible de la Assemblea Nacional Catalana, un instrumento clave para comprender el momento actual, constató este hecho cuando afirmó al medio digital Crític que, si se considerara española, “se plantearía votar a Podemos o a Izquierda Unida“. Aunque matizaba: “Pero en Cataluña la única solución rompedora es la independencia”.

La ANC acumuló su capital simbólico liderando el intenso ciclo de movilizaciones iniciadas en 2012 y que ha desencadenado este proceso.

La lista unitaria de Podemos y ICV-EUiA, a la espera de que Procés Constituent (PC) se pronuncie al respecto, también tomaron prestada la consigna para dar nombre a la candidatura, Catalunya, sí que es pot [Cataluña, sí se puede]. Y la coincidencia con la lista independentista puede ser mucho más que nominal si la monja benedictina Teresa Forcades acaba en un puesto destacado de la lista.

Teresa Forcades, la monja anticapitalista que ha dado el salto a la política en España. Leer más aquí.  

Un plebiscito por la independencia o unas elecciones constituyentes. Término, este último, que ambos espacios políticos utilizan para hablar del escenario posterior a la contienda electoral: “Vamos a unas elecciones plebiscitarias que desencadenarán un proceso constituyente”, asegura a VICE News el presidente de ERC, Oriol Junqueras.

Aquellos que rechazan plantear estas elecciones en clave de ruptura también coinciden en señalar semejanzas entre ambas apuestas electorales.

Así lo sugiere el vicesecretario del PP en Cataluña, Juan Milián, a VICE News: “Esta lista de izquierdas ayudaría mucho a los objetivos del independentismo. Al final son dos listas muy parecidas: las dos tendrán como líder a una persona de extrema izquierda, un nuevo comunismo, y son dos listas populistas, pues en vez de aportar soluciones hablan en términos de ‘enemigo’, que sería España o el Partido Popular, al que hay que combatir. Lo que proponen es una división muy radical de la sociedad catalana”.

Milián lo tiene claro: “Las elecciones plebiscitarias no existen en España. No se atreverán a hacer un decreto en ese sentido pero sí que intentarán que el debate sea independencia sí o no”. “Es una cuestión de nacionalismo contra libertad”, afirma tajante.

El vicesecretario del PP en la comunidad autónoma insiste en que no irán a las elecciones con un bloque de los partidos que él llama “no nacionalistas”, pero entiende que “hace falta otro gobierno: un gobierno de concordia, un gobierno que esté para todos los catalanes”. Milián invita al llamado “bloque constitucionalista” a tener amplitud de miras y a pactar un gobierno “diferente a lo que ha habido hasta ahora”. Este bloque incluye a los socialistas catalanes y a Ciutadans, Partido de la Ciudadanía.

Sobre la respuesta del Estado español ante el desarrollo de la apuesta independentista por el gobierno catalán: “El gobierno de España va a frenar y va a impugnar, como ha hecho hasta ahora, el intento de levantar lo que ellos llaman estructuras de estado. Unas estructuras que no han servido para nada, una manera de gastar el dinero público. Propaganda”.

A finales de junio, el TC admitió a trámite el recurso del gobierno de España contra las iniciativas legales del parlamento catalán que, entre otras cosas, plantean la creación de una administración tributaria propia.

Hoy mismo trascendía una incorporación relevante a la formación favorable a la independencia: el ex entrenador del Barcelona, Josep Guardiola, cerrará la lista bajo la cual una parte significativa de los partidarios del ‘Sí’ a la independencia van a converger.

Sigue a Quique Badia en Twitter @qbadiamasoni