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Edu Omega ha sido quizás el miembro más en la sombra de Urano Players, colectivo vallisoletano que tiene como cabezas más visibles y reconocidas al dúo que forman Erik Urano y Zar Uno y en el que todos sus miembros, en mayor o menor medida, han aportado un aire nuevo y más abstracto a la escena nacional. Tras asomar una patita produciendo “El estado del bienestar” de Miguel Grimaldo (otro de los componentes de la crew), hoy hablamos con Edu Omega con motivo del lanzamiento de su disco en solitario, Evolución Mecánica.
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NOISEY: Para la gente que no os conozca aún, ¿podrías explicarnos qué ha significado y qué ha aportado, desde tu punto de vista, el reconocible y denso estilo de Urano Players al panorama del rap en España?
EDU OMEGA: Cuando sacamos el Voyager Rock’s, probablemente sí que era un sonido diferente a lo que había en ese contexto, los ritmos de la mano de Zar, casi todos eran ritmos con mucha pegada en los bombos, bajos muy sintéticos y tempos que al público quizá resultaban muy extraños para rapear en ese momento así que, lo mismo para mucha gente supuso una interpretación diferente, tanto en la faceta instrumental como en la temática de las letras, en los rapeos, en definitiva, del todo en general.
La música de cada uno de los miembros tiene su propia naturaleza personal, pero en el fondo, a todos os une ese estilo tan particular procedente de Urano, ¿qué rasgos te diferencian del resto del colectivo?
Aún dentro de la unidad de Urano y la empatía que tenemos respecto al sonido, cada uno tiene su búsqueda y sus influencias. A la hora de hacer ritmos creo que sí que existen diferencias respecto a Zar, Grimaldo , Porre o More, en el trato de las baterías, los bajos, etc. y al escribir, pues parecido, cada uno lo hace desde su subjetividad, aunque haya afinidad el contenido no deja de ser subjetivo.
Desde aquel Voyager Rock’s (trabajo de Urano Players en 2009), hemos ido disfrutando de los proyectos de distintos compañeros tuyos. ¿Ha tardado tanto en ver la luz un trabajo de Edu Omega por alguna razón en especial?
(Risas) Pues ha tardado tanto por muchos factores, el principal, mi trabajo que me quita mucho tiempo. Luego, la indecisión a la hora de producir, no sé la de veces que habré cambiado de ritmos, pero sobre todo la voluntad de dar un concepto al disco con el que me sintiese identificado, eso es quizás lo que más me ha condicionado para darle la forma final.
Además de mc, eres también productor, de hecho has producido todo el disco y eres, además, un buen freak de los aparatos. Cuéntanos cuáles son tus aparatos fetiche para producir, qué otro cacharro te encantaría incorporar a tu estudio y si tienes alguna rutina a la hora de hacer música.
Desde que tuve la oportunidad de comprar algo de equipo mi vida cambió. Siempre me fliparon los sintetizadores, cuando empezaron a entrar en el rock, en el jazz, etc. Me alucinaban las líneas de sinte y cuando tuve mi primer sintetizador, un Yamaha SK20, me di cuenta de que en mí existía una faceta que había permanecido dormida hasta entonces, la cual hacía hasta que me olvidase de comer. He tenido muchos sintes y he ido vendiendo y comprando, buscando el que más me llenaba. Mi sinte favorito es el Prophet 600, de Sequential Circuits, es una pasada como suena y ahora mismo no tengo predilección por ninguno, ¡¡¡pero quiero todos!!!!
En cuanto a la rutina de producción, ninguna… simplemente, en cuanto mi trabajo me permite disfrutar de tiempo libre, lo dedico a encender los pilotos de la nave y volar. Tampoco tengo ningún canon a la hora de crear, puedo empezar con una línea de bajo o de sinte, empezar con una batería, empezar con un sampleo… lo que vaya surgiendo, la verdad, no tengo ningún patrón.
Desde el título del trabajo a las letras, haces referencias y paralelismos continuos a temas relacionados con la ciencia, sea la física, astronomía, matemáticas incluso biología. ¿Tu relación con todo esto tiene algún punto profesional o es simplemente curiosidad y aprendizaje personal?
Es simple curiosidad e inquietud, creo que forma parte de la evolución del ser humano. Según vas creciendo te haces preguntas y buscas respuestas que te llevan a otras preguntas y así sucesivamente, buscando en libros, buscando en documentales, hablando con la gente más cercana o también con la gente con la que menos te lo esperas, hasta ver que en gran parte se está vacío
Otra de las cosas a las que haces referencia es a lo que llamamos la policía del pensamiento, de hecho le das importancia suficiente como para llamar a un tema 1984, ¿qué opinión te merece la situación actual que vivimos en este aspecto?
Creo que cada vez hay más control, tanto a nivel físico como a nivel de la psique y quizás se trata de una manera muy inteligente porque nosotros demandamos ese control de manera inconsciente. La clave es Internet, es el mayor canal de información y mucha gente lo utiliza como un canal nocivo más que productivo, que a la vez favorece a la policía. La gente muestra, muchas veces, su vida de manera muy alegre, ya sea por un rol de ego o por el rol que sea y no se da cuenta lo beneficioso que es para el control del rebaño en general.
Hablas en más de un tema de que el cuerpo viene a ser únicamente un vehículo para el alma y que ésta no pertenece a uno sólo (“el cuerpo que nos encontró”, “el alma es de todos”) ¿Cuál es tu visión de la existencia?
Más que hablar de esta idea platónica, hablo de que el cuerpo no es más que la nave sí, pero no de una sola alma, si no de infinitas. Sí que creo en el rollo de que todo está interconectado pero es una percepción que está dormida a nivel colectivo, incluso en mí mismo. En el transcurso de un día cualquiera es muy fácil olvidarse de lo más básico debido a las pautas de lo cotidiano, por los factores que sean. Creo que somos la herencia de todo nuestro linaje pero no únicamente a nivel del ser humano, y pienso que si empleásemos más el conocimiento hacia estos aspectos colectivos, quizás cambiaría algo.
Si hay un elemento reiterativo durante todo el álbum, es el agua (“huelo el mar dentro de un vaso en el que nado”, “el oro y su concepto trajeron sangre al río, “sal del cuerpo, fluye por los ríos”, “no podemos retener el agua en nuestras manos pero damos gracias por componernos.”) ¿Este protagonismo se debe a su vital importancia para nosotros o hay algo más?
Me encanta el agua, disfrutarla en todas sus maneras y a parte de la evidente relevancia en nuestra vida, creo que tiene un doble sentido. El agua es, también, el canal de nuestro deterioro, de todos los desperdicios ilegales y de toda la mierda al fin y al cabo, que va a parar al mar. Entonces, me llama la atención la paradoja: quizás donde tuvo lugar la reacción química para la vida, hoy se haya convertido en el basurero del ser humano.
Hay muchos conceptos de los que hemos hablado que son recurrentes en el universo Urano Players, algunas referencias son incluso comunes en distintos trabajos (en el disco hablas, por ejemplo, de gorriones, energía, Tesla) ¿Es fruto de inquietudes compartidas o se debe a algún tipo de línea a seguir fijada entre vosotros?
Son inquietudes paralelas, al fin y al cabo tienes mil conversaciones y sensaciones con tus compañeros que luego cada uno plasma a la hora de escribir con diferentes connotaciones.
¿Puedes contar a modo de anécdota alguna conversación que hayáis tenido y que te hayas dicho, “sobre esta mierda quiero escribir algo”? Sí que ha habido muchas anécdotas, pero no sabría contar una literalmente una ahora mismo. Pero, por ejemplo, el tema del disco que tengo con More y David Capella se iba a llamar de otra manera, al final se llamó “El hombre de las cicatrices”. Lo cambié porque lo oí en una película y me gustó la idea. No recuerdo exactamente qué película era, creo que una de Godard o de Bresson, no estoy seguro. Resulta que este verano tuve un accidente en bici bastante serio y de ahí la paradoja.
Parafraseándote… Dando pasos en esta evolución mecánica, ¿dónde coño iremos?
Pufff… no sé dónde coño iremos.
Para terminar al estilo “El Intermedio”… ¿qué opinas de que Plutón ya no sea considerado un planeta?
Nosotros no somos nadie para determinar nada respecto al Sistema Solar y menos de la galaxia.
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Puedes escuchar el disco desde hoy en Spotify: