Osos y tigres de madera que ya pasaron a una mejor vida se acuestan sobre tu sala y te explican la razón de su muerte, cómo fue que las balas atravesaron sus cuerpos y, gracias a eso mismo, se convirtieron en sus recipientes. Los animales, al morir por una bala, salga ésta de su cuerpo o no, se convierten en su contendor, en el albergue que aloja al invento que más vidas ha cobrado en la historia de nuestro planeta.
En la impactante serie llamada simplemente Skin (Piel) por el artista nacido en Moscú, Rusia, Dimitri Tsykalov. Se explora la relación entre el animal y la bala por medio de juntar minuciosamente cajas de madera (originalmente hechas para la venta al menudeo de munición) hasta formar lo que asemeja a la piel de un animal muerto, en este caso de osos y tigres, generando una fuerte reflexión sobre la vida y muerte de todos los seres vivos por igual.
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La madera, como símbolo de algo que aún es móvil o vivo toma un papel central de la obra y refleja la ironía de la muerte a través del metal que la deforma y que alberga. Tal vez, queriendo decir que la vida, por su misma naturaleza, siempre tendrá que contener el elemento que la termina. Puedes ver más imágenes de Skin abajo.
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Estos animales no se levantarán a atacarte, pero definitvamente evocarán un sentimiento agridulce sobre la vida y la muerte. Si quieres conocer más obras de Dimitri Tsykalov, visita su sitio.
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