Música

Es posible renunciar a tu trabajo para dedicarte a la música

Cada DJ o productor enclosetado sueña con renunciar a su aburrido trabajo para hacer cosas más grandes. Para muchos la cosa se queda en la fantasía, o como tema de risas entre amigos tras un largo día en la oficina. Otros logran hacer el malabar de cumplir sus tareas corporativas mientras tocan música en su tiempo libre antes de decidirse a romper las cadenas del horario laboral de 9 a 5.

THUMP habló con seis artistas, desde Los Angeles hasta Londres, que son dueños de sellos, DJs y promotores de fiestas. Ellos nos contaron cómo lograron hacer que su pasión se convirtiera en su carrera. Sus experiencias y consejos sobre cómo abandonar la seguridad financiera que genera un trabajo de tiempo completo, brindan lecciones valiosas para cualquiera que esté considerando hacer el gran salto.

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Anthony Parasole

Dónde vive: New York, Estados Unidos.

Foto por Erez Avissar

Trabajaba contestando las llamadas de emergencia para una compañía de energía en Nueva York. Hoy en día es el productor encargado de sellos como The Corner y Deconstruct Music (con Levon Vincent), y es residente de Berghain.

THUMP: Cuéntanos de tu vida y de tu trabajo antes de renunciar para concentrarte en la música.

Solía trabajar para ConEdison, quién suministra, distribuye y mantiene todos los recursos energéticos de Nueva York. Trabajaba en el departamento del gas respondiendo llamadas de emergencia sobre fugas u otros accidentes. Como es un trabajo 24/7, tenía el beneficio de horas flexibles; balanceaba entre irme de gira, escribir música, manejar un sello y organizar eventos. Durante mis últimos años en la empresa se estaban volviendo cada vez más demandantes con mi tiempo pues perdimos fuerza laboral y enfrentamos desastres serios como el huracán Sandy y el colapso de edificios. Cuando la balanza estaba más inclinada hacia mi trabajo que hacia mi música, hice un esfuerzo consciente para empezar a hacer la transición entre dejar mi trabajo de tiempo completo y dedicarme a la música.

¿Qué cadena de eventos te llevó a perseguir la música como trabajo de tiempo completo, y cómo lo lograste?

The Corner, mi sello, había aterrizado en la lista de fin de año de Resident Advisor como uno de los mejores del año. Así que, mientras seguía trabajando en ConEdison, decidí pasar de varias agencias que hacían bookings a una sola agencia que hiciera bookings más enfocados en el techno. Preparé un par de lanzamientos para el sello y usé todo mi tiempo libre para trabajar en mi estudio, lo que me llevó a completar algunos EPs y remixes propios que me ayudarían a sobrellevar la transición. Tenía planeado dejar mi trabajo el 14 de julio, pero en marzo de ese año, cuando llegaba de un tour por Europa, un edificio explotó en Harlem producto de una fuga de gas. Al día siguiente cuando llegué a trabajar, ya habían implementando un turno obligatorio de 16 horas, seis días a la semana. Esa misma tarde pasé mi renuncia después de casi diez años de servicio. No podía tomar el riesgo de perder mis bookings agendados. Así que, así no hubiera estado del todo listo para que pasara, fue la decisión correcta en el momento correcto.

¿Cuál fue la parte más difícil del cambio?

Definitivamente, la parte más difícil fue alinear todas las cosas correctas para transicionar suavemente; Bookear agencias, estar listo como DJ, producir, manejar bien el sello, la salud y asegurarme de que mis cuentas estuvieran pagas para no ir a cometer decisiones artísticas locas basadas únicamente en mis finanzas.

¿Qué consejo le darías a cualquiera que esté considerando hacer la misma movida?

Cualquier aspirante a DJ o productor que esté buscando dejar su trabajo y dedicarse enteramente a la música necesita pensar las cosas muy bien. Asegúrense de que la bola esté rodando hacia adelante y de que exista un momentum. También necesitan tener suficiente dinero entrando antes de dejar sus trabajos.


tINI

Dónde vive: Múnich, Alemania.

Foto por Julia Soler

Antes de organizar las fiestas de tINI and the Gang al rededor del mundo, Sonja-Bettina Günther era productora para Disney Channel en Múnich.

THUMP: Cuéntanos de tu vida y de tu trabajo antes de renunciar para concentrarte en la música.

Realmente nunca planeé volverme DJ, simplemente teníamos tornamesas en casa porque mi hermano y sus amigos estaban muy metidos en la escena del scratch. Después del colegio conseguí una práctica en televisión; aprendí de cámaras, luces, audio, edición, producción, dirección y básicamente todo lo que necesitas saber sobre producción digital para cine y televisión. Después conseguí trabajo en Disney Channel en Múnich y duré cuatro años. Teníamos nuestras propias series, yo era la persona encargada del montaje y la edición, así que editaba videos durante la semana y tocaba música los fines de semana.

¿Qué cadena de eventos te llevó a perseguir la música como trabajo de tiempo completo, y cómo lo lograste?

No quería correr el riesgo de depender únicamente de mis toques como DJ, porque quería tener la libertad de ser selectiva sobre los lugares a donde iba a tocar. Solamente podía darme ese lujo teniendo un trabajo por otro lado. Una vez me di cuenta que tenía más sentido concentrarme en la música, me quedé lo que más pude en este otro lugar para asegurarme un colchón. Me di cuenta de que había encontrado mi pasión y que podía hacer plata dedicándome a ella, pero esperé hasta que existiera aun interés constante para bookearme. Después del primer verano de las series de tINI y The Gang, me llegaron tantas peticiones que sentí que era el momento. Renuncié a mi trabajo de tiempo completo en el 2007, pero seguí haciendo freelance durante un año después de eso.

¿Qué consejo le darías a cualquiera que esté considerando hacer la misma movida?

Es muy importante que, como artista creativo, se pueda tener la libertad de decir “no”. Si haces la transición antes de tiempo vas a depender de cada centavo que ganes por tocar, vas a acabar prostituyéndote (musicalmente hablando), y tocando en lugares a los que no quieres ir. Espera hasta estar 100% seguro y hasta que hayas ahorrado lo suficiente para rechazar propuestas. Juega por el lado seguro para que puedas conciliar el sueño en las noches, e incluso si te cancelan tres toques puedas comprarte tu yogurt favorito.


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Atish

Dónde vive: Chicago, Estados Unidos.

Foto: cortesía del artista

Atish Mehta solía ser un ingeniero de software para Facebook, y ahora es DJ, productor, y socio del sello Manjumasi.

THUMP: Cuéntanos de tu vida y de tu trabajo antes de renunciar para concentrarte en la música.

Hice una especialización en ingenieria de sistemas y siempre fui un nerd de los computadores. La música era solamente un hobby. Hice algunas consultorias para IT por un par de años, y luego me asocié con un startup personalmente financiado para hacer ingeniera de software antes de hacer el salto a Facebook. Trabajé con ellos por cinco años, trabajando sobre todo en la aplicación de messenger para iPhone.

¿Cuál fue la parte más difícil del cambio?

Convencer a mis papás. De hecho, no estoy seguro de haberlo hecho del todo. Se criaron en India, mi papá se rompió el culo para ganarse una beca y viajar a los Estados Unidos para darle una vida mejor a sus hijos. Su hijo va a la universidad, se gradúa y consigue un buen trabajo; todo para dejarlo todo botado y entrar en un mundo de caos e incertidumbre. Nunca estuvieron convencidos de que esto era lo correcto, fue más como “esperemos que nuestro hijo saque esto de sus sistema para que vuelva al tema de los softwares”. Esa fue la forma en la que se los vendí, excepto que dudo volver.

¿Qué consejo le darías a cualquiera que esté considerando hacer la misma movida?

Primero, hablen con todas las personas posibles que estén en las mismas y pídanles su opinión. Segundo, hagan todo lo posible para asegurarse un año en ahorros, o por lo menos aseguren una entrada que los sostenga durante ese tiempo. SI no hacen eso, van a tener que hacer sacrificios, y si no los hacen, van a empezar a preguntarse qué los hizo tomar el salto en primer lugar.


D’Julz

Dónde vive: Paris, Francia.

Foto por Vito Fernicola

Julien Veniel duró muchos años balanceando entre su trabajo como publicista y el desarrollo de su carrera como DJ. Hoy en día es dueño de su propio sello, Bass Culture, y es residente en el club Rex de París.

THUMP: Cuéntanos de tu vida y de tu trabajo antes de renunciar para concentrarte en la música.

Empece a ser DJ mientras estudiaba comunicación en la universidad. Hice una práctica en una agencia de publicidad de París y me contrataron, así que dejé los estudios para volverme copy, mientras los fines de semana me dedicaba a tocar. Luego me mudé a Nueva York, donde hice otra práctica en otra empresa antes de que me dieran un trabajo de tiempo completo como copy. Duré dos años en D.D.B. y un año en Euro R.S.C.G y todo era genial; amaba ambos trabajos y tuve la oportunidad de trabajar con equipos creativos en cuentas grandes como Volkswagen.

¿Qué cadena de eventos te llevó a perseguir la música como trabajo de tiempo completo, y cómo lo lograste?

En ese momento era difícil conseguir un trabajo fijo con un contrato a largo plazo, y al mismo tiempo, mi carrera estaba despegando los fines de semana. En publicidad puedes tener semanas muy tranquilas, pero luego llegan las campañas y junto con ellas las trasnochadas o los horarios en fines de semana. Eso me ponía en situaciones difíciles cuando tenía que tocar.

Mis colegas sabían de mi carrera musical porque aparecía en revistas y siempre me escabullía a comprar discos en hora de almuerzo. Pero no fue tan chévere cuando tuve que pedirle a mi director que me cubriera para poder tomar un vuelo porque tenía un toque. También hay mucha política en la publicidad. Tienes que comprometer tu creatividad y no por las razones correctas. Ese lado no me gustaba. No iba a envejecer bien en publicidad, quería expresar mi arte.

¿Qué consejo le darías a cualquiera que esté considerando hacer la misma movida?

Tómense su tiempo para desarrollar sus habilidades. La razón por la cual pude tomarme el tiempo para aprender cómo ser DJ fue precisamente porque tenía otro trabajo que pagaba la renta. En el momento en el que me volví lo suficientemente bueno, pude dejar mi trabajo. Me asombran mucho las personas que simplemente dejan todo y empiezan de cero, pero yo nunca haría eso. Cuando tomé la desición, estaba listo.


TOKiMONSTA

Dónde vive: Los Angeles, Estados Unidos.

Foto: cortesía de la artista

Antes de publicar en sellos como Brainfeeder y OWSLA, de hacer toures internacionales y de empezar su propia marca Young Art, Jennifer Lee trabajaba en la industria de los videojuegos.

THUMP: Cuéntanos de tu vida y de tu trabajo antes de renunciar para concentrarte en la música.

Mi primer trabajo serio fue en una editorial de video juegos. Lo disfrutaba mucho. Seguía haciendo música y tocando aquí y allá, pero como un hobby sobretodo. Empecé a producir en la universidad y no tenía un interés real por ser DJ, quería crear más que todo. Empecé a presentarme una vez me di cuenta de que existía una demanda y cuando me enamoré de ese arte.

¿Qué cadena de eventos te llevó a perseguir la música como trabajo de tiempo completo, y cómo lo lograste?

La verdad es que me despidieron de mi trabajo y eso fue una mierda. Pero fue un tiempo muy oportuno, porque fue en el momento en el que estaba recibiendo muchas propuestas para irme de tour y tocar en otros lugares de Estados Unidos e incluso otros países. Decidí darme un año para hacer música de tiempo completo y aquí estoy.

¿Qué consejo le darías a cualquiera que esté considerando hacer la misma movida?

Es un riesgo que vale la pena tomar si sientes que te llama. No tengas expectativas, solamente mira hasta dónde te lleva.


Enzo Siragusa

Dónde vive: Maidenhead, Reino Unido.

Foto: cortesía del artista

Siragusa trabajó en IT en sus veintes. Ahora es DJ, productor, y dueño del sello y fiesta de FUSE London.

THUMP: Cuéntanos de tu vida y de tu trabajo antes de renunciar para concentrarte en la música.

Fui donde un asesor de carreras cuando tenía 15 y le pregunté cómo ser DJ. Era 1992, el pico de la escena rave, y yo estaba enamorado de ella. El asesor me aconsejó ir a la universidad de Henley y estudiar negocios. Eso hice, y de alguna forma me adentré en el mundo del IT y el boom del dotcom. Cuando cumplí 21, compré una casa y tenía un carro deportivo. Disfrutaba de mi plata, pero sentía que había un vacío en mi vida. Estaba gastándome hasta el último centavo en fiestas cada vez más pesadas. Mientras compraba discos, soñaba todo el tiempo con ser DJ.

¿Qué cadena de eventos te llevó a perseguir la música como trabajo tiempo completo, y cómo lo lograste?

A los 23 años fui a Ibiza para veranear y conseguí una residencia tocando en los atardeceres. Cuando regresé no tenía plata, así que volví al IT y sin darme cuenta los años pasaron. Mi carrera como DJ no estaba yendo a ningún lado, pero mi carrera en IT estaba volviéndose un tema de obligación. Fui a hablar con la psicóloga de la empresa y me dijo que me moviera al área de eventos. Me dijo, “lo mejor que puede hacer la gerencia es meterte en un cuarto lleno de personas y dejar que tu magia haga lo suyo”. Inmediatamente me imaginé en un club.

¿Cuál fue la parte más difícil del cambio?

Lo más duro es la parte financiera. Durante mi primer verano en Ibiza despilfarré mucha plata con mi mi tarjeta de crédito, y luego tuve que trabajar para pagarlo. Eventualmente tuve que hacer sacrificios serios, como irme a vivir con familiares a pesar de tener 30 años.

¿Qué consejo le darías a cualquiera que esté considerando hacer la misma movida?

Necesitas tener un plan para financiarte solo. Necesitas plata para comprar discos, pasar tiempo en clubes e invertir en tu carrera. No renuncies a tu trabajo de la nada, trata de pedir un día libre a la semana y retírate de a pocos hasta que sepas parar del todo. Frenar abruptamente es un shock grande. También debes tener una clara distinción entre el trabajo y la fiesta. Esa fue una línea muy borrosa por un tiempo para mi, y se te pueden escurrir muchos años si no eres disciplinado.