El artista Arjen Boerstra pronto viajará al Polo Sur para hacer papas a la francesa. A principios de este mes, lanzó su proyecto durante un festival de cosecha de papas en Groningen, Holanda. Instaló un puesto de papas a la francesa a dos kilómetros de dicho festival. El puesto se veía un poco triste, ya que estaba en medio de la nada. Sin embargo, algunos de los asistentes lograron encontrarlo. Esto fue solo un intento de Arjen para lograr su objetivo final: vender papas a la francesa en tierra de nadie, el Polo Sur.
Me preguntaba por qué demonios Arjen querría hacer papas a la francesa al otro lado del mundo, entre glaciares, en el aire helado. Así que lo llamé para descubrirlo.
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MUNCHIES: Hola Arjen, ¿podrías explicarme de qué se trata este proyecto? Arjen Boerstra: En 2004, empecé a pensar en todo lo que me podría convertir. Siendo artista, no te conviertes en nada. Un artista realmente no participa en la sociedad. Tenía la idea de crear papeles que me permitieran participar ocasionalmente en la vida, pero de forma inesperada.
Comencé instalando mi puesto en medio de un campo de papas. Así es como el producto final, las papas a la francesa, se ponen en contacto con el producto original, las papas. De esta manera, los agricultores pudieron comer su propia cosecha. Cuando una tienda vende papas a la francesa en la ciudad no significa nada, porque hay muchas iguales. Solo cuando sacas el puesto de su contexto familiar y lo colocas en un lugar inesperado, se convierte en algo especial. Hice lo mismo durante Oerol [un festival cultural en la isla holandesa de Terschelling]. Mi puesto no estaba ubicado en medio de las festividades, sino en una playa aislada. Los visitantes del festival podían ir por papas a la francesa, pero los botes paseantes también podían echar amarras para ordenar. Me parece que tiene un elemento romántico.
Como artista, ¿por qué te inspira un puesto de papas a la francesa? Tengo bellos recuerdos de la infancia con estos puestos. Solíamos vivir en un vecindario donde podías encontrar puestos con facilidad. Donde otras personas tienen buenos recuerdos del heladero, yo los tengo de las papas a la francesa. Solíamos comerlas también en la playa, pero el haber estado en la playa de Terschelling durante Oeral fue solo una coincidencia.
La papa es una especie de hilo conductor en tu vida artística, ¿por qué? La papa ocupa un sitio importante en Holanda, tanto para la vida de muchas personas como en nuestra dieta. De hecho, he realizado más proyectos con ellas, como una papamorfosis, donde mi cara se convierte en una papa. Eres lo que comes, literalmente. Durante toda mi vida, me han dicho que mi cabeza bulbosa parece una papa. Así que es cuestión de simple autocrítica.
¿Cuál es el objetivo final de tu proyecto? Me gustaría estar completamente instalado en un glaciar de la Antártida. Ya puedo imaginarme cómo sería: viendo hacia afuera y perderme por completo en la vista del paisaje. Y luego prepararé papas a la francesa y las venderé en medio de la nada. Tengo un gran sentimiento por el proyecto. El viaje en sí mismo será una gran aventura también. Viajaremos con tres personas, llevaré un equipo de camarógrafos. Van a filmar todo. Eventualmente, quiero que haya un documental y una colección de fotos.
Arjen y su puesto de papas a la francesa en la playa de Terschelling. Foto cortesía de Arjen Boerstra.
La Antártida es un largo viaje. Es posible que pocas personas vayan por papas holandesas, pero cuando lo hagan, ¿no estarán asustados? Es decir, las encuentras tan poco en el extranjero, ya no digamos el Polo Sur. Quiero trasladar la escena culinaria callejera de Holanda a la Antártida. Ese es el objetivo principal para mí. Las papas a la francesa son de poca cultura y el arte es de alta cultura. Me gustaría conectar ambas.
¿De veras es posible hacer papas a la francesa en medio del frío? No tengo idea cómo funcionarán el gas y el aceite para freír a una temperatura de menos veinte grados. Es parte de la aventura; lo veo todo como un gran viaje de descubrimiento. Planeo rentar un auto para transportar el puesto, atravesar Sudamérica hasta el Polo Sur, pero siempre puedo cambiar este plan. La ruta es al menos igual de importante que el objetivo mismo en este proyecto. Si vamos al Polo Sur en barco, en algún punto navegaremos por zonas congeladas. Debo cortar las papas y pelarlas antes de que esto suceda. Creo que es una idea romántica cortar y pelar papas a bordo. Puedo imaginarme ahí sentado. Por supuesto, prepararé papas deliciosas para la tripulación.
¿Cuánto paga la gente por unas papas? Pagan dos euros por una porción de papas y la mayonesa es gratis. También pueden poner tanta mayonesa como quieran. No obtienes mucha mayonesa con tus papas hoy en día y creo que no tiene sentido, así que no pido dinero extra si quieren más.
¿Planeas hacer más papas a la francesa en otros lugares durante tu ruta? Veré con lo que me encuentre y a partir de eso consideraré las opciones que tengo. Sería maravilloso estar en algún acantilado. Pero lo que sea está bien, mientras sea lejos de la civilización y muy adentro en la naturaleza. Estaré lidiando con fuerzas primordiales, lo cual me parece emocionante. Me recuerda un poco a una pintura de Caspar David Friedrich, ‘El Caminante Sobre el Mar de Niebla‘. A pesar de que el ser humano se ha extendido notablemente, sigue siendo insignificante y pequeño. Esa imagen me fascina. Muchas personas no entienden mi proyecto. ‘¿Cuál es el punto?’ Escucho con frecuencia. Pero no cuestionas todo en la vida, o ¿sí? Si piensas en todas las cosas sin sentido e imposibles de la vida siento lástima por ti.
Esta entrevista fue editada y resumida para una mejor claridad.
Este artículo fue publicado originalmente en holandés en MUNCHIES NL.
Sigue y apoya el proyecto de Arjen en www.antarcticpotatoeater.org.
