Muchos bares celebran Halloween ofreciendo cocteles que suenan bastante macabros, llevando a cabo concursos de disfraces nocturnos, o, no haciendo nada en absoluto. Pero, este año, Replay en Chicago realmente se tomó el espíritu del Halloween muy enserio y disfrazó todo su establecimiento.
En una oda al legendario bar de los Simpson, que es Moe’s, Replay cambió por completo su apariencia y se convirtió en Moe’s, teniendo incluso un reporte informativo continuo de Kent Brockman del Canal 6, huevos en salmuera y, por supuesto, muchas llamaradas Moe, el cóctel de jarabe para la tos que, en retrospectiva, pudo haber sido el precursor del sizzurp.
Videos by VICE
El cambio de imagen del Replay luce mucho más pulido que el antro en caricatura que lo inspiró, y sus Llamaradas Moe probablemente no contengan codeína, pero su disfraz de Halloween ha sido un gran atractivo para los lugareños. En declaraciones a la CBS Chicago, el gerente de Replay, Sean Adamson, un reconocido admirador de Los Simpson, dice que la recepción por parte de los asistentes lo tomó por sorpresa.
“Sabía que estaría lleno”, le dijo a la CBS Chicago. “Sabía que sería popular. Pero no tenía idea de que sería así de popular”. Otros accesorios meticulosamente curados incluyen una figura de cartón de Moe, maquinas arcade con juegos de los Simpson, dispensadores de Cerveza Duff y una servilleta con el alma de Bart en ella.
Según la CBS Chicago, la taberna Moe’s en Replay “permanecerá abierta al menos hasta Halloween”. Esperemos que el personal de Replay reciba algo más que el “el trato grosero” que recibe Moe Szyslak por parte de los asiduos a su bar, que le ponen serpientes en la caja registradora, le prenden fuego o que son desterrados del bar por hacer la desagradable broma “del azúcar“.
Cuando le preguntamos al propietario de Replay, Mark Kwiatkowski, si usa jarabe para la tos en su Llamarada Moe, le respondió a MUNCHIES vía correo electrónico: “No lleva nada de jarabe para la tos, no arderá y probablemente tampoco sea legal”, y agregó que la inspiración para el disfraz del bar fue su “amor juvenil por los Simpson y ahora su amor renovado debido al interés que su hijo de 12 años tiene en ellos”.
