“Salvo se merece varios reportajes”. Es la conclusión de nuestro compañero de oficina más joven tras pasarse una hora de reloj buceando en las fotos y vídeos de Facebook de este carnicero, encargado de la zona VIP del concierto de David Guetta en Zaragoza. “Con cariño, maño”, es la frase con la que nos recibe al teléfono el autor de eslóganes como “Entre Guetta y Guetta: chuleta”, mientras viaja en tren a la fiesta Crazy de Joy Eslava en Madrid. Nos ha contado cómo compatibiliza este mundo con su trabajo en la charcutería del mercado.
VICE: ¿Cómo saltaste del mercado al mundo de la fiesta?
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Víctor Salvo: Todo comenzó cuando me divorcié. Empecé a salir y tal y un día me propusieron hacer una fiesta y acepté. Ahí empecé a mover gente y mover gente. Hace un año dije “hasta aquí hemos llegado” y dejé de promocionar nada, pero hace unos meses me llamaron y me dijeron que querían que llevase yo la zona VIP de Guetta porque creían que soy el único que la puede llenar. Y así ha sido y aquí estamos. Yo era la persona óptima.
Y la gente recoge sus entradas en la carnicería.
Podía hacer solo la promoción, pero mi idea fue que salieran cinco euros más baratas y ahorrar a la gente comisiones de cajero. ¿Quién va a mover más de lo que he movido yo aquí en Zaragoza alguna fiesta o un evento? Vienen aquí a por sus entradas y si no envío a mi equipo de chavales o las llevo yo mismo. Aquí en Zaragoza me conoce mucha gente. Y la gente que me conoce se queda impactada.
Ya he visto que se hacen fotos contigo y todo.
Les hace mucha gracia verme y tal. Hay mucha gente que viene solo a verme. En mi trabajo hablo con mucha gente en el día a día. Les gusta cómo digo las cosas. ¿Sabes lo que quiero decir? Por lo que sea, la gente me sigue. En Facebook más amigos no puedo tener, porque he llegado al tope de 5.000. Y eso que yo he puesto videos polémicos, porque pongo lo que pienso. Lo que llama al público cuando quieres anunciar algo es que uses tu toque personal. Tienes que ser tú mismo. Cuando haces algo para agradar a los demás o tener “me gustas” no funciona.
¿De dónde sacas ideas cono la de “Entre Guetta y Guetta: chuleta” ?
Eso es en el momento. Me sale así. Ya veo que me tenéis controlado. Jajaja. En el momento de hacer las cosa sale solo. Yo estoy en el puesto y tengo tantísimas cosas que me sale la cabeza sola. Un poquito de gracia para que la gente se divierta. Divertirse es importante.
¿Qué te dicen tus compañeros y clientes del mercado?
En el mercado es la bomba. Muchas señoras me tienen en el Facebook y me comentan la jugada, me vienen, me dicen… Yo creo que se lo pasan bien. Vienen por la mañana y dicen “hostia” y vienen a comentarme cosicas. Con cariño, maño. Cuando haces las cosas con cariño es cuando sale todo bien. Si se me vienen a quejar yo les explico que nunca me meto en el muro de nadie a politizar. Si no te gusta lo que digo, me borras y ya está, no hay ningún problema.
¿Cómo se compatibiliza el trabajo de charcutero con todo esto?
Es complejo, pero tengo a mi familia que son los que están apoyándome siempre. Ya no me gusta trabajar continuo como trabajaba antes. Llega un momento en que es incompatible Yo hago muchas horas a la semana en el puesto y encima estoy todo el día con llamadas. Llega el fin de semana y ya tengo 40 años. No es lo mismo que antes. Salgo el sábado un rato y llegan las siete de la mañana y digo “¿para qué?”. Hay que racionalizar un poco.
¿Guetta sabe que te encargas de llevar su zona VIP?
No tengo ni idea. Igual no le gusta. No lo sé. Tampoco soy yo de hacerme fotos con nadie. Supongo que le conoceré y yo encantado, porque es un artista internacional mundialmente conocido, pero es que yo soy muy llanico. Ahora estoy con nuevos proyectos, como el de una chica, Claudia, que tiene una enfermedad rara. Estoy haciendo una fiesta para recaudar dinero. No es que sea solidario, es que soy solidario con quien creo que tengo que ser solidario. Voy al 100% y estoy muy volcado con eso porque me ha tocado la fibra. Y bueno, a ver qué sale, porque cada día salen más cosas.
