Tener sexo es lo mejor. Te puede mantener satisfecho por dos días enteros, y mejorar tu rendimiento en el trabajo. Pero a veces, los orgasmos pueden presentarse con efectos secundarios no tan placenteros como: ataques de llanto, dolor o incluso convulsiones, según una reseña de estudios publicada recientemente.
Los ginecólogos James Simon, profesor clínico de obstetricia y ginecología en la Facultad de Medicina de la Universidad George Washington, y Anna Reinert del Centro Médico de la Universidad de Maryland, hicieron una lista de los fenómenos relacionados con los orgasmos, o de las respuestas anormales de los orgasmos, que habían escuchado durante toda su carrera. Después, utilizaron esa lista para buscar ejemplos de cada respuesta.
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En la lista de los efectos secundarios del orgasmo estaban: la risa, el llanto, los estornudos, y la debilidad general también conocida como cataplexia. A pesar de no haber encontrado nada relacionado con la risa cuando te vienes en la documentación médica, sí encontraron una columna de citas con una carta de una mujer que se quejaba de su novio porque se cagaba de risa cuando estaba a punto de venirse. Al hecho de llorar o sentirse deprimido después del sexo se le conoce como disforia postcoital (PCD, por sus siglas en inglés). Sin embargo, otras investigaciones muestran que no existe una conexión directa con el clímax y el PCD, ya que las personas pueden experimentar disforia incluso después de encuentros sexuales en donde no llegan al orgasmo. Los autores señalan que no existe un fenómeno post-orgasmo como tal, pero aún así les pareció importante mencionarlo.
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En cuanto a los estornudos, los doctores creen que podría ser por que los estímulos (en este caso, naturales en el sexo) activan no sólo una sino múltiples partes del sistema nervioso parasimpático. Los estornudos son más comunes en los hombres. Algunos hombres experimentan lo que se conoce como síndrome post orgasmo, se sienten cansados y con fiebre, casi como si tuvieran gripa, y les da de cuatro a siete días.
Algunos informes también describieron que se pueden presentar dolores de pie, oído o en la cara, así como dolores de cabeza que pueden durar desde unos minutos hasta tres horas. Al investigar el dolor en el pie, encontraron un caso de una mujer de 55 años que experimentaba sensaciones de orgasmo en su pie izquierdo después de pasar un tiempo en la unidad de cuidados intensivos. Y cuando tenía un orgasmo de clítoris o vaginal, también su pie lo sentía. Sus doctores sospechaban que era el resultado de que algunas fibras que estaban dañadas se estaban regenerando poco a poco. Los autores también encontraron reacciones más extremas, como convulsiones. Estas convulsiones fueron determinadas como un tipo de “epilepsia refleja”, y el orgasmo sirve como estímulo. Mientras que algunas personas ya habían experimentado convulsiones durante mucho tiempo antes de asociarlas con el sexo, a otras les pasaba por primera vez en el sexo; a esto se le llama “orgasmolepsia”.
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El sexo se presenta en todas las formas y sabores, por eso no es ninguna sorpresa que los orgasmos también. Así que si tú o tu pareja alguna vez dejan salir una risita después del orgasmo, trata de no tomártelo a pecho, probablemente sólo es fisiológico.
