Varios hombres nos cuentan por qué fueron infieles


Foto por Harsh Agrawal
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¿Quién no ha hecho o se ha planteado hacer trampas alguna vez, ya fuera en una partida al Risk o engañando a una persona con la que has asumido un compromiso formal?

Según la creencia general, son los hombres los que suelen engañar a sus parejas, traición que se sustenta en un obsoleto concepto patriarcal de que “estamos programados para ser lo peor con las mujeres, porque tenemos que esparcir nuestra semilla” y blablablá. Sin embargo, existe una teoría que sugiere que las mujeres también tienen razones de carácter evolutivo para cambiar de pareja. Tanto esa teoría como un artículo que publicamos anteriormente en el que varias mujeres que habían sido infieles explicaban sus razones para ello, cabrearon previsiblemente a muchos hombres. Incluso recibimos varias llamadas de hombres indignados que pusieron en duda la teoría y la veracidad del artículo sin argumentos que apoyaran sus críticas.

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Por tanto, por el bien del equilibrio periodístico, pregunté a varios tíos que habían sido infieles qué razones les habían llevado a serlo, de forma que podamos contratar las razones/excusas de ambos sexos y regodearnos en nuestra incapacidad de ser fieles unos a otros. ¡Viva la igualdad de géneros!

“La sensación de sentirse deseado por alguien es la hostia”

La última vez que fui infiel estando en una relación fue este mismo año. Lo jodido es que también estaba enamorado de ella. Pasó más de una vez. Mi pareja también me fue infiel, lo cual no es excusa. En todo caso, es como si tuviera un botón de autodestrucción que se activa antes de decidir que voy a follar con otra persona. Es horrible y premeditado, la verdad.

Tampoco fue un desliz que cometiera estando borracho en una fiesta: eran las tres de la madrugada y estaba repasando mi lista de amistades de Facebook cuando de repente decidí que en vez de enviar un mensaje a mi novia, buscaría echar un polvo con otra, concretamente alguien a quien mi pareja no conocía ni llegaría nunca a conocer.

Supongo que soy un tipo tremendamente inseguro y necesito obtener gratificación de la gente. Además, la sensación de sentirse deseado por alguien es la hostia. Aunque también sospecho que soy un sociópata borderline, porque el sentimiento de culpa me duraba un minuto y luego seguía con mi vida como si nada. Hay que separar el deseo de follar con alguien del hecho en sí. Más vale que te hagas una paja para que se te pasen las ganas de follar con la tía que conociste anoche.

Caspar, 23 años

“En parte fue por venganza y por despecho”

Nunca había sido infiel; de hecho, la gente que lo era me parecía una escoria humana. Yo lo había sufrido muchas veces, y una de ellas me afectó tanto que me juré a mí mismo que nunca engañaría a mi pareja porque sabía lo mal que se pasaba.

No hace mucho, mi novia se fue de vacaciones con amigas y yo me enteré de que poco antes del viaje me había sido infiel. Estaba dispuesto a terminar la relación, pero preferí esperar a que ella volviera. Pocos días antes de su regreso, yo tenía una boda. Aunque no tenía intención alguna de ponerle los cuernos, en la boda conocí a una chica y, como estábamos bebidos, acabamos pasando la noche en mi habitación de hotel. Al principio me sentía horrible, porque técnicamente seguía con mi novia, pero aquella chica era impresionante.

Cuando mi novia volvió, lo dejé con ella y le dije lo que había hecho. Lo hice en parte por venganza y también por despecho, para sentirme mejor. Ahora tengo una lucha interna por haberme convertido en lo que tanto desprecio.

Neal, 23 años

“Supongo que acabé aburriéndome de mi relación”

Llevaba cinco años de relación cuando conocí a una chica en una web de citas. Quedamos para tomar algo y por temas de trabajo llegué una hora tarde a nuestro encuentro. Varias copas después, me propuso ir a casa de sus padres, que esa noche habían salido. Subimos a su habitación y estuvimos en su cama, viendo una peli de mierda. Me dijo que como había llegado una hora tarde, no habría sexo, pero que me haría una mamada.

Un año después de aquello, terminé con mi novia. Supongo que acabé aburriéndome de la relación, porque ella era la única chica con la que había estado desde los 16 años. Estaba atrapado en la rutina. Viéndolo en frío, tendría que haber cortado con ella mucho antes, pero no es tan fácil cuando no conoces otra cosa y además estás cómodo así. Pero bueno, no creo que haber sido infiel cambiara lo que sentía por mi novia. Quizá tenga una visión de la vida y las mujeres un poco cínica o sea incapaz de sentir, un poco como Dexter.

Kevin, 26 años

“Las mujeres nos dan miedo, y para tener cierta sensación de control, las engañamos”

Creo que una infidelidad es la peor mentira que existe y de la que tú eres la principal víctima. Me di cuenta de ello porque, por primera vez, me vi obligado a ser sincero que una chica. No es que le fuera infiel técnicamente, pero llevaba un tiempo intercambiando mensajes con una chica y la cosa empezaba a ponerse intensa entre nosotros. En fin, el caso es que mi novia se enteró y leyó los mensajes. La verdad es que una infidelidad emocional, que quizá sea incluso peor.

Nuestra relación estaba deteriorada y yo no supe estar a la altura para afrontar la situación, lo que provocó desconfianza entre nosotros. Realmente nos queríamos mucho e intentamos hacer que funcionara. Nos cuesta mucho ser sinceros con nosotros mismos y con los demás porque duele oír la verdad. Sin embargo, por muy doloroso que resulte, es posible hacer que la tónica de una relación sea la verdad, y nunca vas a poder ser feliz en una relación siendo infiel.

Una mujer es como tu espina dorsal, la posible futura madre de tus hijos, una gran amiga y la persona con la que copulas, ¿y se te ocurre tratarla mal? Yo creo que las mujeres nos dan miedo, y para tener cierta sensación de control, las engañamos. Por otro lado, quizá ayudaría que ellas reconocieran que también los hombres son sensibles. No hay duda de que engañar a tu novia, ya sea a sus espaldas o abiertamente, está mal, pero también es señal de que algo no va bien en la relación o contigo.

Isaiah, 29 años

@williamwasteman

Traducción por Mario Abad.