Artículo publicado originalmente por VICE Reino Unido.
“De Niro es un idiota”, dice Steve Schirripa en un episodio de su nuevo podcast. “No podría ser más grosero. Cuando lo saludas, le resulta prácticamente imposible devolverte el maldito saludo a menos que esté escrito en un guión”.
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Schirripa es conocido por haber interpretado al mafioso de gran corazón, Bobby Baccalieri, en The Sopranos. En su podcast, Talking Sopranos —copresentado por Michael Imperioli, quien interpretara a Christopher Moltisanti— es mucho menos deferente. Además, tampoco tiene tiempo para Werner Herzog o esos tacaños famosos a los que conoció mientras trabajaba en los casinos de Las Vegas antes de iniciar su carrera como actor: “¿Tiger Woods y Scottie Pippin? Ellos dejan las peores propinas. A Michael Jordan solíamos llamar el ‘Avaro Jordan’ “.
Pero hay más en el podcast que las antiguas rencillas de Schirripa; la honesta y entretenida transmisión incluye detalles, historias y datos de posiblemente el mejor programa de televisión de todos los tiempos. Es un recorrido de la serie episodio por episodio, por lo que abarcará 86 programas en total, y cuenta con invitados del elenco y del equipo técnico que nos hablan de sus memorias de la serie. Según el propio par de conductores del podcast, les tomó un poco de tiempo adaptarse a las circunstancias (tener que hacerlo de forma remota debido al confinamiento), pero gracias a esto hemos tenido muchas exclusivas.
En particular, parece que Tony Sirico, quien interpretara a Paulie, podría tener un podcast de varias partes sobre su vida, con varias revelaciones sobre su pasado. Por ejemplo: dice que en el pasado solía hacerle calzón chino a Jimi Hendrix en un club nocturno, y que alguna vez fue tan musculoso y atractivo que apareció en la portada de una revista porno para mujeres.
Hasta ahora, han abordado nueve episodios de la serie, por ello hablé con Schirripa e Imperioli para saber más acerca de su experiencia al rememorar la serie y explorar su legado.
VICE: ¿Cómo ha sido volver de nuevo a este mundo?
Steve Schirripa: Genial. Ninguno de nosotros había visto la serie desde que fue emitida. Es muy divertido verla desde el principio, porque había olvidado muchas cosas. Es como almorzar con Michael una vez por semana y luego ponernos al día con el elenco y el equipo técnico.
Michael Imperioli: Ha sido realmente genial rememorar todo después de tanto tiempo de que terminó la serie, abordarla con un poco más de objetividad. Remontarnos a esos tiempos y lo que sucedía detrás de cámara.
¿A ustedes les gusta el programa tanto como a todos los demás? ¿Es el mejor programa de televisión de todos los tiempos?
SS: Creo que realmente se sostiene tal como lo hizo hace 20 años. Lo estoy disfrutando mucho más ahora. También lo entiendo mucho más, como todo ese asunto con la Dra. Melfi [la terapeuta de Tony Soprano]. Además me estoy dando cuenta de lo divertido que es el programa, me hace reír a carcajadas. Disfruto cada minuto de él. Incluso si no hubiera participado en él, considero que es el mejor programa en la historia de la televisión. Es uno de los pocos programas que veo y que no quiero que termine nunca. Algunos programas los ves y piensas, ‘¿Cuándo carajo se acabará esto?’.
MI: Siento lo mismo. Lo que realmente recuerdo al verlo es lo entretenido y atractivo que es tanto a nivel intelectual como cómico, junto con su ambiente de gángster noir. Muchos de los shows que surgieron después de The Sopranos y que recibieron muchos elogios, no creo que hayan capturado esa misma mezcla de comedia y drama.
¿El éxito del programa te hizo sentir presionado en alguna forma?
MI: Nunca sentí ningún tipo de presión durante toda la serie, simplemente me fascinó cada minuto. Nos divertíamos tanto que no teníamos que preocuparnos.
SS: Para mí, la presión llegó después de que terminó la serie. Había algunas personas que me amaban y otras que me querían ver fracasar. Recuerdo que estaba en algún lugar de Brooklyn con Michael, justo después de que terminara la serie, y un chico se nos acercó y dijo: “¿Y ahora ustedes a qué se van dedicar?”. Como si al haber terminado el programa nosotros ya no tuviéramos más opción que volvernos empacadores de comestibles o algo así.
¿Cómo es su relación con sus propios personajes después de todos estos años? ¿Cómo los perciben?
MI: Como actor, fue un papel tremendo. La gama de emociones y situaciones que vivió Christopher fue el sueño de todo actor. También, siempre admiré su ambición, el hecho de que siempre trabajara para lograr las cosas que quería.
SS: Bobby era un buen chico de familia, quien creo que entró en la mafia por accidente, a través de su padre. Me gusta cómo se desarrolló con los años. Al principio solo era el tonto cuidador de Junior, pero se desarrolló a tal punto que se sentaba a la mesa de los Soprano en las cenas de los domingos. Entonces, tal vez no era tan tonto como todos pensaban. Se casó con la hermana del jefe, a pesar de que ella era un tanto malvada.
Hay muchos asesinatos en el programa. ¿Era difícil a nivel personal cuando el personaje de alguien con quien habían estado trabajando estrechamente durante años debía ser asesinado?
MI: Esa era la parte más difícil. No era tanto que lamentaras la pérdida del personaje, sino que sabías que ya no verías a esa persona en el trabajo. Éramos amigos cercanos y había mucha camaradería y diversión. Seguimos unidos hasta el final, pero en cuanto a las personas que fueron asesinadas antes, fue algo duro. Los extrañamos.
SS: Me lamenté mucho por los compañeros que fueron asesinados en el transcurso del programa. Se quedaban sin trabajo, por lo que también se quedaban sin ingresos, además de perderse toda la travesía que implicó la serie. Si te mataban en la segunda o tercera temporada, te perdías de muchísimo. Eso hubiera sido muy difícil para mí. Realmente habría sido un momento complicado en mi vida que me hubieran asesinado en las primeras temporadas, tanto en el aspecto financiero como en el emocional por ya no poder trabajar con mis amigos.
¿Ustedes sabían desde el principio que sus personajes durarían hasta la temporada final, o era algo que se iba decidiendo con cada temporada?
SS: Era algo que se decidía con cada episodio.
MI: No lo sabíamos en absoluto. Aunque, en realidad nunca me preocupé por eso, ya que supuse que Christopher era un personaje demasiado colorido para deshacerse de él.
SS: Yo sí me preocupé. Cuanto más se involucra en la trama tu personaje, más se identifica el público con él y tendrás una mayor oportunidad de permanecer en la serie. Cuanto más te arriesgues, menos posibilidades hay de que te maten. Yo estaba preocupado, para ser honesto. Ni siquiera compré un apartamento en Nueva York hasta que terminó el programa, así de preocupado estaba. Cada episodio sudaba pensando que podía ser el último.
Tony Sicirco, quien interpreta a Paulie, ¿parece que también es un gran personaje fuera de la pantalla?
SS: Tony es un tipo maravilloso y rompieron el molde cuando lo hicieron. No hay otra persona en la tierra como Tony Sirico. Nos hemos reído mucho con él.
MI: Es único en su clase. Pero gran parte del elenco ya eran grandes personajes por derecho propio; ya llevaban vidas interesantes antes de la serie. Así como Steve estuvo en el negocio de los casinos en Las Vegas durante años, Tony tenía una vida criminal antes de entrar en la actuación. No se trató solo de actores que interpretaban personajes, sino de personas que habían vivido y que tenían mucha experiencia que podía ser aprovechada.
SS: En el caso de alguien como Tony, e incluso yo, sus fortalezas se toman en cuenta para el desarrollo del personaje. Había mucho de Tony en Paulie, y viceversa. También era hipocondríaco en la vida real. El es una persona peculiar. En una ocasión asistimos todos a un evento que organizó una noche y entre sus invitados estaban nueve de sus médicos con sus esposas.
Este tipo de detalles son la mejor parte del podcast para mí.
SS: Esa es la diferencia entre nuestro podcast y los que existen que han hecho otras personas que no tienen nada que ver con el programa. Nosotros lo vivimos, ellos no saben nada más allá de lo que han leído.
¿Alguna vez ha habido algún aspecto negativo relacionado con participar en The Sopranos?
MI: Ha sido abrumadoramente positivo para mí en muchos aspectos de mi vida.
SS: Lo único malo para mí fue haber sido encasillado como el mafioso. Es decir, no voy a interpretar a un profesor de inglés, no nos engañemos, pero hay otros roles. Siempre quieren verte interpretar a un gángster y encasillarte en eso.
¿Cómo ha sido llevar a cabo este podcast teniendo un tremendo hueco debido a la muerte de James Gandolfini? En varios sentidos, además de recordar la serie, recuerdan también la pérdida de un amigo, ¿o me equivoco?
MI: Sí, ha sido una experiencia agridulce. Creo que una de las razones por las que no había visto el programa en mucho tiempo, especialmente en los últimos siete años, es porque es demasiado doloroso. Me recuerda que tenemos un amigo que ya no está con nosotros. Lo extrañamos, sin duda. Además, hay muchas otras personas, tanto del elenco como del equipo técnico, que también fallecieron. Y se siente como si reviviéramos todo eso. Es agridulce, pero la dulzura prevalece.