Shane O’Neill: sangre y sudor en Badalona

Cuando el nombre de Shane O’Neill salió anunciado en la gran pantalla que la SLS había dispuesto junto al ‘skatepark‘ de Badalona, un chico que estaba sentado a mi lado le dijo a su amigo: “¡Mira! ¡Shane O’Neill! ¡Ya verás! ¡Este tío es un robot! ¡Lo cae todo!”. Tuvimos ocasión de hablar con Shane antes de la Street League BDN Agora Skatepark. Si aquel tipo era un robot, sabía cuándo tenía que reír, lo cual aún me asustaba más: ¿tenía delante de mí una evolución de androide de última generación?

Durante los minutos previos a la final, Shane se sentó en este bordillo y dejó de moverse. Mientras el resto de ‘top pros’ practicaban de un lado a otro, él estuvo allí, quieto, observando el infinito… ¿Estaría limpiando la caché mientras refrescaba el ‘buffer’? Foto de Oskar Sueiro.

La primera prueba SLS de este año, en un nuevo escenario y un nuevo país. ¿Cómo lo ves?

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Me parece brutal no sólo por el sitio, que es increíble, si no por el ‘skatepark‘ que han construido. En otras ocasiones ves algún tipo de defecto, pero este para mí va perfecto, todo desliza y es fácil ver bien desde todos los ángulos. Si tengo que escoger algo, me quedo con la zona central, el ‘handrail‘… aunque en realidad todo está muy bien.

¿Llevarías una prueba de la SLS a tu ciudad, Melbourne?

¡Claro! Pero sé que es realmente caro hacer un evento de estos. Quizás algún día. Recuerdo cuando era pequeño el Campeonato del Mundo que se hacía en Australia, con miles de personas… los mejores skaters de todo el mundo estaban allí.

Las dos últimas temporadas has sido el rey del 9Club, el selecto grupo de los trucos con más puntuación. ¿Habrá un 10?

[Ríe] La verdad, no sé que habría que hacer para conseguir un 10, no sé si lo veremos algún día.

Un switch backside flip switch lip slide… Y no parecía sudar a pesar de la temperatura ambiente. Foto de Oskar Sueiro.

¿Cuántas veces has estado por aquí?

Esta es como la séptima vez, y la verdad, siempre es un placer.

Todos los visitantes decís cosas buenas cuando toca hablar con los medios de la ciudad en la que estáis… ¿En serio no ocultas nada?

No, de verdad. Bueno, siempre hay quien te cuenta cosas, sobre todo el tema de los robos y las cosas que pasan por las Ramblas y eso, pero yo nunca he tenido ningún problema. Además siempre vengo con alguien que conoce a los patinadores locales y siempre sale todo bien, buen skateboarding… y chicas muy divertidas [ríe]. He estado en otros sitios, como Madrid, Málaga… y lo mismo.

¿Patinas con los locales de cada sitio?

Al venir con marcas como Monste, suelo estar más con los del equipo. Además, en el caso de Barcelona, como todo el mundo sigue viniendo a patinar por la ciudad, al final estoy con gente que no es de aquí. Hay demasiados patinadores, es difícil.

Tras un pase impecable en semis, Shane desapareció en la final. No acabó de cuadrar las rondas y empezó a fallar y a sudar… Foto de Oskar Sueiro.

…y también a sangrar. Antes de los intentos de mejor truco, súper importantes para sumar puntos para la clasificación final, Shane se sentó y dejó ver lo que lleva dentro. No hay gesto más humano que el de la desesperación cuando las cosas no salen según lo previsto. Foto de Oskar Sueiro.

¿Se está cociendo un nuevo tipo de skater profesional, centrado en campeonatos, que puede patinar casi todo, súper técnico y consistente?

No creo. El skateboarding sigue siendo muy diverso como para que eso ocurra. Hay muchos caminos distintos que tomar, como por ejemplo patinar en campeonatos de ‘bowls‘ y transiciones en general. Creo que cuanto más patinas, mejor lo haces, pero hay tanto por hacer…

¿Siguen dejándote combos de trucos imposibles tus fans de Facebook?

[Ríe] Sí, de vez en cuando.

¿Alguno que no piensas volver a hacer?

Algunos no es que no lo piense, es que no sé si podría volver a hacerlos. Recuerdo ahora el ‘big spin switch front crooks 360 flip out‘ que salió en el vídeo Nike… No creo que eso sea posible de nuevo… o sí, pero me llevaría demasiado tiempo.

Me refería más a trucos raros, rollo ‘benihanas‘ o cosas así…

[Ríe] Todo acaba volviendo de una forma u otra, nunca sabes (risas).

¿Qué supuso el ‘nollie backside heelflip‘ en Wallenberg? Nadie había pensado que algo así fuese posible en esas escaleras… ¿Qué tienes previsto en un futuro?

Los trucos sueltos están bien pero mis objetivos siempre son las partes de vídeo completas. Patinar en campeonatos y en ‘skateparks‘ está bien para que te vean los chavales, es relativamente fácil, pero grabar en la calle trucos para sacar una parte de vídeo promocional es lo más difícil y es en lo que me centro a futuro.

Este ‘bigspin frontside boardslide to fakie’ y otras maniobras no fueron suficientes para ganar el premio especial en la ‘jam’ del ‘best trick’ tras la entrega de trofeos de la SLS, pero desde luego no se puede decir que O’Neill no lo intentara hasta el final. Foto de Oskar Sueiro.

Siempre te has mostrado muy reservado con tu vida privada, así que no iré por caminos que otros ya pisaron sin éxito… pero ésta tengo que hacerla: ¿detrás de Shane O’Neill hay un robot capaz de hace trucos con el skate que el resto solo pueden soñar? ¿Shane nunca pasa un día entero tirado en la cama o cosas así?

Patinar ocupa prácticamente todo mi tiempo… ¡incluso el libre! [Ríe]. A veces veo películas, me tomo algo, pero sólo unas cervezas de vez en cuando, procuro estar saludable. Pero todo muy normal.

¿El resultado? Un 7º puesto para uno de los favoritos a subir a lo más alto quizás no es demasiado destacable, pero Shane O’Neill seguirá sorprendiéndonos con sus impecables partes de vídeo y sus trucos imposibles. Si en la SLS de Badalona hubiesen dado un premio a la perseverancia, sin duda lo habría ganado él.

¿Y lo de ser un robot? Una máquina habría parado tras los primeros síntomas para no dañar el sistema. Incluso los animales tienden a dejar de comer y moverse cuando les ocurre algo que no pueden controlar: solo los humanos somos capaces de seguir adelante incluso cuando todo parece estar en contra. Es una fuerza visceral que nos empuja sin atender a razones. Exactamente la misma fuerza que mueve a Shane O’Neill.