Siete títulos de siete posibles. El equipo de balonmano del FC Barcelona ha firmado una temporada perfecta: el conjunto catalán se ha impuesto en la Supercopa de Catalunya, la Supercopa de España, la SuperGlobe (el mundial de clubes de balonmano), la Copa ASOBAL, la Liga ASOBAL, la Champions League y la Copa del Rey.
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Durante toda la campaña, el Barça prácticamente solo ha encontrado un rival: el Fraikin BM Granollers. Cuatro de los siete títulos sumados por el Barça han tenido a los vallesanos como testigos directos (e involuntarios): contra el Granollers empezaron los azulgranas su periplo en septiembre (victoria por 37-22 en la Supercopa de Catalunya) y contra el Granollers lo terminaron nueve meses después (victoria por 27-26 en la final de la Copa del Rey).
Por el camino, pleno absoluto de victorias en la Liga ASOBAL —el Barcelona la ganó con nada menos que cinco jornadas de antelación— y una única derrota, en la Liga de Campeones y frente al Wisla Plock polaco. Una auténtica marcha militar para el equipo que entrena Xavi Pascual.
“Ha sido una temporada difícilmente mejorable —e irrepetible. Estoy muy contento de cómo hemos jugado y de que hayamos logrado sumar siete títulos. Ha sido una campaña magnífica para nosotros”, aseguró Pascual en el programa semanal La Madera, dedicado a la actualidad del balonmano.
El equipo ha superado todas las expectativas y ha logrado igualar el hito conseguido en la temporada 1999-00 por el mítico Dream Team que dirigía Valero Rivera. Quince años después de ese inolvidable éxito, Pascual ha recogido el testigo del histórico entrenador zaragozano.
Memorias del Dream Team: en la temporada 1999-00, el equipo entonces dirigía Valero Rivera se impuso en todas las competiciones que disputó. Aquí, el mismo conjunto unos años antes, en 1997. Imagen vía Reuters.
Pascual, sin embargo, rehúye la comparación con el Dream Team y destaca las diferencias que existen entre el balonmano actual y el que se jugaba en la época del legendario equipo de David Barrufet, Tomas Svensson y Enric Masip.
En declaraciones al diario Sport, el actual entrenador del Barça aseguró que su escuadra es “distinta”: “Lo que se hizo tiene un valor absoluto, y lo de ahora también tiene su valor. Es diferente, ni mejor ni peor, entre otras cosas porque el balonmano de ahora no tiene nada que ver con el de hace 10 o 15 años. Se juega distinto”.
Tanto Rivera como Pascual, sin embargo, han seguido caminos análogos: antes de ser entrenadores, ambos jugaron con la zamarra azulgrana y se convirtieron en profundos conocedores de la filosofía del club. No les fue difícil plasmarla posteriormente en sus equipos.
Siguiendo los preceptos históricos del club y gracias a una plantilla que muchos consideran la mejor de la historia, ‘Pasqui’ ha logrado ensamblar un equipo extraordinariamente competitivo cuyas mayores fortalezas son la solidez defensiva, un contragolpe fulminante y una gran fluidez en la circulación de la pelota.
Para ello han sido fundamentales tres piezas fichadas ya en 2009: el bielorruso Siarhei Rutenka, el ruso Konstantin Igropulo y el canario Dani Sarmiento. A lo largo de los años, a estos tres se han unido jugadores de calidad como Nikola Karabatic, Gudjón Valur Sigurdsson y Gonzalo Pérez de Vargas para acabar de formar una escuadra prácticamente invencible.
El bielorruso Siarhei Rutenka, pieza clave en el Barça de balonmano, celebra un gol frente al KIF Kolding danés. Imagen vía Scanpix Denmark/Reuters.
El fichaje del joven portero toledano ha sido, de hecho, uno de los grandes aciertos de una dirección técnica capaz de gestionar con gran éxito un vestuario plagado de estrellas. Pérez de Vargas ha mostrado una progresión a lo largo de la campaña que le ha colocado entre los mejores del mundo. También ha sido importante la llegada de Sigurdsson, un jugador letal a la contra gracias a su endiablada velocidad.
Fernando López Hervás, experto de Canal+ en balonmano, explica a VICE Sports que “la duda principal que podía haber esta temporada era la entrada de Vargas debido a su juventud, pero al final ha resultado ser una las claves de éxito de esta campaña”.
“Pascual ha ensamblado una defensa inmejorable”, asegura López Hervás. “Las estadísticas muestran que el Barça ha triplicado en contraataques al resto de los equipos: si juntamos portería, defensa y contragolpe, ya no hay rival para el conjunto barcelonés”.
Gonzalo Romero, analista de balonmano para el periódico Ara, cuenta a VICE Sports que la base del éxito de esta temporada ha sido “la suma de todas las piezas necesarias”: “Xavi Pascual ha sabido optimizar muy bien su plantilla y encontrar el equilibrio”, explica Romero. “Cuando tienes jugadores de este nivel y los gestionas bien, no hay rival que se resista”.
El francés Nikola Karabatic encarna mejor que nadie los éxitos de este equipo. El galo, que llegó al club barcelonés en verano de 2013, ha demostrado una vez más sus infinitas virtudes para la práctica del balonmano jugando partidos estelares en los momentos más complicados. El francés ha sabido compensar con creces el fallo que cometió en las semifinales de la Champions League de la pasada temporada y que privó al equipo del título.
El francés Nikola Karabatic es una fuerza de la naturaleza: no en vano se le considera el mejor jugador de balonmano del mundo. Imagen vía Scanpix Denmark/Reuters.
Tras este año mágico, sin embargo, el futuro del poderoso conjunto de Pascual parece amenazado: la próxima campaña, el equipo azulgrana deberá aprender a vencer sin la ayuda precisamente de Karabatic, que anunció su marcha al Paris Saint-Germain de su Francia natal. Nikola, elegido mejor jugador del mundo en 2014, se reunirá con su hermano Luka en el pabellón Pierre de Coubertin —donde se convertirá, además, en el jugador mejor pagado del mundo.
‘Pasqui’ explicó en la rueda de prensa sobre Karabatic que hacía “semanas” que el francés había comunicado sus deseos personales al club: “El Barça comprendió la explicación del jugador. Nikola cuenta con todo nuestro apoyo”.
“Niko es insustituible”, prosiguió Pascual: “En mi opinión, es el mejor jugador de todos los tiempos”.
Gonzalo Romero destaca que Xavi Pascual está haciendo “un rápido estudio de mercado” tras la salida de Karabatic, pero que sin embargo “hay muchos profesionales que ya han rechazado la oferta del entrenador” porque “la liga ASOBAL, comparada con las otras ligas de Europa, es muy menor“.
Xavi Pascual tiene ante sí un reto mayúsculo: seguir ganando a pesar de la baja de su mejor hombre, Karabatic. Imagen vía Flickr.
“Se ha roto un ciclo deportivo. Sustituir a Karabatic es como suplir al Messi del balonmano: prácticamente imposible”, concluye Romero. El adiós del galo, de hecho, obliga al equipo azulgrana a incorporar al menos a dos jugadores, uno para la defensa y otro como lateral izquierdo.
El primer fichaje de la nueva temporada ha sido el croata Kamil Syprzak, que ha llegado libre del Wisla Plock de Manolo Cadenas —ex entrenador del Barcelona durante las temporada 2007/09—. Syprzak es un pivote de 23 años con un gran talento ofensivo y un enorme margen de mejora.
La segunda incorporación es el polaco de 29 años Marko Kopljar, que llega con la carta de libertad del PSG tras jugar allí durante las tres últimas temporadas. Kopljar es un especialista defensivo que intentará suplir la baja de Niko.
El Barça también ha anunciando las renovaciones de dos de sus mejores jugadores, el central Dani Sarmiento y el portero Gonzalo Pérez de Vargas. El primero seguirá en el club hasta 2016 tras ampliar su contrato un año; el segundo será azulgrana hasta 2020.
La sustitución de Karabatic representa un reto de gran magnitud que llena el club de incertidumbre de cara a la próxima temporada. Para el analista Fernando López Hervás, sin embargo, la situación no es tan complicada: “Hablar del Barça es hablar de un gran equipo. El equipo es un conjunto con una base bien asentada. Es cierto que suplir la determinación de Karabatic será complicado, pero al final el Barça es un equipo con mayúsculas”.
