Artículo publicado originalmente por VICE ASIA.
Un hombre de 63 años de la provincia de Hubei en China se emborrachó un poco y, en una historia que podría sonarte familiar tratándose de shots de vodka, llegó un momento en que terminó vomitando. Excepto que la noche de fiesta salvaje de este tipo pasó de “¡qué borrachera de mierda!” a “¡ay, mierda!” muy rápido cuando vio que en su vomito algo que más tarde supo que era un tumor. Temiendo haber vomitado por equivocación una parte de su cuerpo, el hombre decidió tragarse la bola de carne solo para estar a salvo.
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Según los reportes, este hombre cuya identidad se desconoce había sentido una incomodidad en la garganta durante un tiempo, pero como no le afectaba la respiración ni la deglución, no se molestó en ir a que lo revisara un doctor. Esto fue solo hasta que su reflejo nauseoso le provocó un dolor agudo y terminó, de repente, arrojando una “bola de carne”.
Aunque inicialmente el hombre se tragó con ayuda de un vaso de agua lo que describió como una “lengua larga y bifurcada”, tuvo la sensatez de acudir al médico poco después del incidente. Después de que los médicos del Hospital Wuchan escucharan su historia y le realizaran un examen endoscópico, descubrieron un tumor de 15 cm de largo que estaba creciendo en la parte superior de su esófago (la conducto de alimentación que conecta la boca con el estómago).
El tumor ha sido identificado como un fibroma, del tipo que crece en los órganos y que generalmente es benigno, pero que puede joderte de tanto en tanto, según su localización en el órgano. Y aunque los médicos lograron extirparlo con éxito, este tumor en particular podría haber bloqueado la tráquea del hombre y causar que se asfixiara de no haberlo detectado.
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