Profetas de la censura: el problemático hip-hop de Escuadrón Patriota

Este artículo fue publicado originalmente en Noisey, nuestra plataforma de música.

Raudel Collazo es Escuadrón Patriota, banda referencial en Cuba que lo mismo rapean o hacen hip-hop, "que al final son la misma cosa", dice Raudel, sentado frente al mar en el malecón de La Habana.

Escuadrón Patirota tiene miles de seguidores en Latinoamérica y Estados Unidos. Su fama procede de no mantener lo boca cerrada. Sus letras son críticas y espirituales y los que los escuchan saben que Raudel se arriesga por ellos, por aquellas voces que tienen miedo y por las que no. "Nosotros hacemos música contestataria, música inteligente, o consciente; plasmamos la realidad de todos los días de la Isla. Le ponemos un tono poético pero a la vez crítico a lo que hacemos. Por supuesto, eso nos ha traído problemas, pero ser uno mismo, siempren los trae", sentencia Raudel.

Con más de cuatro discos producidos de forma independiente, Escuadrón Patriota se enfrenta a una censura férrea por parte del gobierno cubano: "ahora aquí todo es muy complicado", cuenta Raudel y en su voz se siente el cansancio, "es difícil que nos acepten las instituciones gubernamentales, por eso a la hora de trabajar y hacer presentaciones, no siempre tenemos espacios para tocar. Nuestra música es muy crítica y eso entra en contradicción con el discurso político del sistema".

Raudel es considerado un profeta en su tierra, pero a un nivel muy undreground, porque para el gobierno existe pero es una figura incómoda. Es un contador de historias con una potente y segura posición que apoya a su pueblo y sobre todo a la juventud cubana. Todas las dificultades que padece para expresarse no le impiden seguir adelante, "óyeme mi hermano, sí, tenemos muchas cosas en contra, llevo mucho tiempo censurado, mi música no la pasan por medios masivos ni tenemos tocadas, pero menos mal que tenemos los circuitos alternativos; es un precio que hemos pagado. Tenemos una presencia fuerte en lo político, de lo cual los cubanos no podemos escapar", sonríe irónico.

Hace unos años estuvo en Ecuador grabando uno de sus discos La Nueva Filosofía de Lucha y pudo ver en carne propia lo que era estar fuera de la Isla. Eso le permitió afianzar lo que hoy promulga: que los que se fueron algún día regresen a Cuba. "Yo entiendo que la gente quiera irse porque las oportunidades aquí son escasas, las libertades están coaccionadas, y el futuro está hipotecado a una ideología que debe actualizarse. Cuando estuve fuera me di cuenta de que estamos atrasados en miles de cosas pero a la vez el mundo está conectado por la pasión hacia la música: es universal", reflexiona mientras mira hacia el horizonte marítimo. "Mira, hacia allá está el mundo, nosotros también somos mundo. Yo lo que quiero es que la gente se regrese a Cuba, que nos reconciliemos como nación, como patria, rescatar nuestra esencia más elemental".

Para despedirse me recita un párrafo de una de sus canciones, en donde habla de esa problemática, de la migración forzada. "Hay que ser cubano para entenderlo; hay que vivir aquí mi hermano. Cuba, con todos sus problemas, es el mejor país del mundo".

"Cubanos todos donde quiera que estén
Se está cerrando el ciclo, yo tengo mucha fe
El problema de cuba es de los cubanos
Si queremos comenzar a pensar en una patria digna
Libre con progreso para todos
Debemos empezar nosotros mismos con la reconciliación
Ya está bueno que para lograr lo que uno quiere en su país
Tenga que migrar a otro lugar
Nosotros no tenemos que marcharnos a ninguna parte
Vamos a luchar desde aquí"