Agresivos murales tergiversan las animaciones de Disney y los ‘Looney Tunes’

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Agresivos murales tergiversan las animaciones de Disney y los ‘Looney Tunes’

Tal vez reconoces a un personaje o dos en la exhibición ‘We Were All To Be Kings’ de Víctor Castillo.

Es difícil no darse cuenta de la influencia de la animación estadounidense al ver las pinturas del artista chileno, Víctor Castillo. La pieza central de su nueva exhibición, We Were All To Be Kings, es una instalación de pinturas tamaño mural que se apropian de imágenes en tecnicolor y personajes de estudios de animación como Van Beuren y Walt Disney. Similar al animador y caricaturista Joan Cornella, Castillo crea su propia interpretación de la estética idealizada y optimista de la clase media americana del siglo XX. Castillo incorpora imágenes que encuentra a su trabajo, permitiéndole reconstruir su propia narrativa. Crea escenas nuevas que infunden fondos y personajes por separado, principalmente del elenco de la serie de 1930, Silly Symphonies, de Disney.

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Viviendo en Los Ángeles y creciendo en Chile, Castillo desarrolló una perspectiva multicultural en la cultura americana que ha funcionado como la principal influencia en sus pinturas. En su conversación con la galería, el artista notó que los sujetos de sus pinturas se están robando unos a otros. Estas imágenes de guerra, similar a Rebelión en la Granja de George Orwell, son la manera en que el artista expresa su crítica al capitalismo moderno. "Crecí con una fascinación por la cultura popular americana", escribe Castillo. "En las producciones de Disney que llegaron a Chile, ves al Tío Scrooge viajando por todo el mundo en busca de riqueza; llegaban a un lugar con mucho oro, y él y sus sobrinos lo tomaban y eran felices. Me siento con el derecho de apropiarme porque crecí con esto. Mis pinturas vienen de mis sueños".

El título de la exhibición se refiere a un poema llamado "We Were All To Be Queens" (Todas íbamos a ser reinas), de la poeta chilena Gabriela Mistral. El poema es una explicación lírica sobre cómo los sueños de nuestra infancia se desvanecen cuando crecemos. La galería escribe, "Similarmente, Castillo sigue sueños de riquezas con un final sorprendente en We Were All To Be Kings, ofreciendo fábulas medievales y reflexiones con humor sobre el estado actual de la sociedad".