Esto es lo que te pasaría si solo comieses ramen de sobre

Que los universitarios subsisten a base de sopas y fideos orientales es un tópico muy manido, pero probablemente siga siendo cierto. Y es que estos productos son baratos, sabrosos y, si los compras en recipientes de poliestireno, ni siquiera tienes que ensuciar cuencos o cubiertos para disfrutar de una comida caliente (aunque la palabra “comida” quizá sea demasiado generosa).

Cuando el hambre ataca y la cafetería está cerrada, estas sopas son el recurso más fácil para jóvenes que viven en residencias estudiantiles sin cocina. Quizá haya un pequeño porcentaje de universitarios que no vivan de estos polvos, pero que aun así los consumen con mucha frecuencia.

Esto nos lleva a plantearnos la ineludible pregunta: ¿son buenas las sopas de sobre para la salud? ¿Qué podría pasarnos si las consumiéramos siempre, como seis o siete noches a la semana?

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“En un sobre de sopa instantánea no hay mucho más que carbohidratos y sal”, nos cuenta Abbey Sharp, dietista de Toronto y autora de The Mindful Glow Cookbook. Lo mismo pasa con esos ladrillos de fideos deshidratados a los que hay que añadir agua hirviendo.

Sharp señala que este tipo de sopas tienen poco o ningún contenido de fibra o proteína, dos de los elementos principales de la comida que hacen que una persona se sienta saciada después de comer. Por lo tanto, es muy posible que poco después de haberte comido uno de esos productos vuelvas a tener apetito, según Sharp. “Tampoco tiene muchos micronutrientes, por lo que no aporta vitaminas ni antioxidantes”, añade.

Pero volvamos a los carbohidratos y la sal. Pongamos que tienes hambre y decides comerte un bote de sopa oriental. En función del producto que compres, cada uno puede contener 1150 mg (o más) de sodio. “Es una cantidad extremadamente alta”, advierte Jim White, nutricionista, dietista y propietario de los centros Jim White Fitness.

La OMS recomienda no sobrepasar los 2 gramos de sodio diarios. Dos botes de fideos instantáneos ya alcanzan ese límite, al que luego hay que añadir otros productos cargados de sodio que suelen comer los estudiantes, como la pizza, la comida basura, etc.

Consumir demasiada sal eleva el riesgo de sufrir hipertensión, cardiopatías y, a la larga, accidentes cerebrovasculares. A corto plazo, consumir tanto sodio puede provocar retención de líquidos, según White, lo que a su vez genera aumento de peso, hinchazón y falta de energía, señala.

Además, el consumo de sodio potencia la deshidratación, sobre todo si estás acompañando tu sopa oriental con unas cuantas cervezas o un par de Red Bull con vodka. La deshidratación provoca una deficiencia en las funciones físicas y cognitivas —como problemas de memoria y atención—, algo nada deseable si estás en plena época de exámenes. También puede provocar dolores de cabeza y estreñimiento, según una investigación de la Universidad de Carolina del Norte.

“Las sopas instantáneas también contienen glutamato monosódico (MSG) y TBHQ, que pueden producir efectos secundarios no deseados”, añade White. El MSG es un aminoácido no esencial que da a las sopas instantáneas ese sabor a umami tan agradable. Aunque la FDA lo considera un alimento seguro, algunas personas aseguran haber sentido náuseas, dolor de cabeza o malestar después de consumirlo. El TBHQ también está considerado seguro, aunque se cree que en altas dosis puede resultar tóxico para el cerebro y provocar otros problemas de salud.

El alto contenido de carbohidratos refinados de estas sopas tampoco es ideal, según Sharp. “Lo ideal es que la mitad de los hidratos que consumes procedan de fuentes con alto contenido de fibra”, añade. Hay estudios que relacionan el elevado consumo de carbohidratos refinados con el drástico aumento en el índice de incremento de peso y de casos de diabetes del tipo 2 en la población estadounidense.

Esto no quiere decir que las sopas en polvo sean una basura. White señala que contienen micronutrientes, concretamente riboflavina y tiamina; además, tienen muy bajo contenido de azúcar.

Pero la mayoría de los expertos en nutrición desaconsejan comer CUALQUIER cosa en exceso, con la excepción, quizá, de las hortalizas. Incluso la comida sana puede dejar de ser tan sana si la consumes a todas horas y excluyendo otros alimentos beneficiosos, según White. “Hay que comerlo todo con moderación” sonará a tópico, pero es una verdad que también se aplica a la alimentación.

Tal vez las sopas instantáneas no sean lo peor que te puedas comer, pero si lo haces todas las noches, seguramente engordarás, te sentirás hinchado y letárgico a la mañana siguiente y quizá incluso experimentarás cambios de humor y problemas para concentrarte. Todo esto se agrava si, además, el resto de tu dieta es igual de mala.

“Para mí, la sopa instantánea es como los cupcakes”, dice Sharp. Si te gusta, no te prives. “Pero deberías verlo como un capricho, no como una comida ni como un aperitivo”, añade.

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